El precio de la deseada paz

La matanza producida por la bomba terrorista del pasado sábado en la ciudad de Omagh es un terrible recordatorio del precio que deberá pagar el Ulster si no consigue la paz:(...) El hecho de haber elegido una ciudad con una población mixta de católicos y protestantes para cometer esta atrocidad de muestra el cinismo de los fanáticos, así como su voluntad de oponerse a la paz a cualquier precio. Todo esto debería llevar a reforzar la frágil coalición que apoya el proceso de paz. (...) La confirmación de la existencia de grupos perfectamente armados desgajados del IRA es un desafío al compromiso...

La matanza producida por la bomba terrorista del pasado sábado en la ciudad de Omagh es un terrible recordatorio del precio que deberá pagar el Ulster si no consigue la paz:(...) El hecho de haber elegido una ciudad con una población mixta de católicos y protestantes para cometer esta atrocidad de muestra el cinismo de los fanáticos, así como su voluntad de oponerse a la paz a cualquier precio. Todo esto debería llevar a reforzar la frágil coalición que apoya el proceso de paz. (...) La confirmación de la existencia de grupos perfectamente armados desgajados del IRA es un desafío al compromiso del Sinn Fein y del IRA Provisional respecto al proceso de paz. El líder del Sinn Fein, Gerry Adams, ha utilizado por primera vez lapa palabra condena tras el atentado de Omagh. Es importante, pero debería ir más allá. El resurgimiento del terrorismo confirma el fallo en la entrega de armas y explosivos del IRA. (...) También la comunidad nacionalista se enfrenta a un desafío. Una razón esencial por la cual el IRA pudo mantener su táctica del terror durante tanto tiempo fue el apoyo prestado por esta comunidad. Si a estos grupos fanáticos, como el IRA Auténtico, se les niega ese apoyo, desaparecerán. (...) No es éste el momento de cuestionar el proceso de paz, o las medidas adoptadas para reforzar lo. Pero sí es el momento para todos aquellos que lo apoyan, unionistas y nacionalistas, de cerrar filas. Porque la única alternativa al proceso de paz es, en el mejor de los casos, más terror.

17 de agosto