La Generalitat construirá una prisión para mil penados junto a la ya existente en Can Brians

El Departamento de Justicia de la Generalitat construirá una cárcel para cumplir condenas con capacidad para unas mil personas en una finca muy cercana a la actual de Can Brians, situada en Sant Esteve Sesrovires (Baix Llobregat). Las obras de la llamada cuarta prisión de Cataluña se adjudicarán a finales del próximo año, durarán dos años y costarán 8.000 millones de pesetas. Los terrenos elegidos corresponden a la finca de Can Margarit, tienen 38 hectáreas de superficie y ya han sido adquiridos por la Generalitat por 232 millones de pesetas.

La consejera de Justicia, Núria de Gispert, ...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

El Departamento de Justicia de la Generalitat construirá una cárcel para cumplir condenas con capacidad para unas mil personas en una finca muy cercana a la actual de Can Brians, situada en Sant Esteve Sesrovires (Baix Llobregat). Las obras de la llamada cuarta prisión de Cataluña se adjudicarán a finales del próximo año, durarán dos años y costarán 8.000 millones de pesetas. Los terrenos elegidos corresponden a la finca de Can Margarit, tienen 38 hectáreas de superficie y ya han sido adquiridos por la Generalitat por 232 millones de pesetas.

La consejera de Justicia, Núria de Gispert, explicó ayer que antes de decidir el emplazamiento de esta prisión se estudiaron otras 10 posibilidades. Las razones de la elección son la buena aceptación que ha tenido el centro penitenciario de Can Brians, puesto que no ha causado problemas a los vecinos de Sant Esteve Sesrovires; el ahorro que supondrá la proximidad a esta cárcel a la hora de construir los accesos y canalizaciones, y la disponibilidad de los propietarios para vender. La nueva prisión, cuyo nombre está todavía por decidir, contribuirá a que las actuales estén menos masificadas. Las últimas cifras oficiales señalan que la población reclusa de Cataluña es de 6.101 personas, de los cuales 4.523 están cumpliendo condena y 1.209 esperan juicio. Los centros que acogen más reclusos son la Modelo (1.322 personas), Quatre Camins (1.301) y Can Brians (1.106). La consejera aseguró ayer que el alcalde de Sant Esteve Sesrovires, el socialista Jaume Galcerán, conocía la decisión de construir la nueva cárcel, y agradeció lo que calificó de "importante plus de solidaridad". Según De Gispert, "el alcalde no está encantado, pero tampoco está en contra". Cuando, hace años, se anunció la construcción de la cárcel de Can Brians, se produjeron numerosas manifestaciones de protesta que en alguna ocasión derivaron en incidentes de orden público. Pese a las palabras de la consejera, el alcalde de este pequeño municipio del Baix Llobregat mostró su indignacíón por una decisión que calificó de "precipitada", informa Manel Torres. Galcerán criticó que el anuncio se haya realizado justo antes de las vacaciones y lo atribuyó a un "intento de desviar la atención de la trascendencia que tiene". Galcerán recordó que hace unos meses, cuando se rumoreó que ése sería el municipio elegido, todos los grupos municipales, incluido CiU, aprobaron una moción en contra. No hay terrenos Núria de Gispert también explicó ayer que la Generalitat ha renunciado definitivamente a construir una cárcel de presos preventivos en la ciudad de Barcelona para sustituir a la Modelo, la de mujeres de Wad-Ras y la de jóvenes de la Trinitat. Como anticipó EL PAÍS el pasado 19 de junio, la renuncia de la Generalitat se debe a la imposibilidad de encontrar un terreno de entre 10 y 12 hectáreas para construir esa prisión. La intención de la Administración autonómica es construir esa cárcel en un radio de entre 30 y 40 kilómetros de Barcelona. Sin embargo, Núria de Gispert exigió ayer al Ayuntamiento de Barcelona que valore la decisión de la Generalitat y "se moje" para encontrar terrenos de modo que sea posible construir en la ciudad una cárcel de cumplimiento de arrestos de fin de semana para 200 personas y dos centros en los que cumplan condenas en régimen abierto un total de 800 personas. Por su parte, el Ayuntamiento de Barcelona aseguró ayer que fue esta institución la que propuso a la Generalitat la construcción de los centros en la ciudad y confirmó las palabras de la consejera cuando aseguró que las negociaciones están muy avanzadas. La Generalitat exige un pacto global en el que se concreten los futuros usos urbanísticos de los solares que ahora ocupan las cárceles, ya que la construcción de viviendas ayudaría a sufragar el coste de levantar esos centros en Barcelona. El consistorio advierte que "siempre respetará el planeamiento urbanístico". Por otra parte, el Gobierno de la Generalitat aprobó el jueves destinar 537 millones de pesetas a la construcción de una unidad psiquiátrica penitenciaria con una capacidad de entre 100 y 120 plazas. Los presos que las ocuparían están internos en las unidades de enfermería de tres prisiones. Las obras se adjudicarán a finales de este año y su entrada en funcionamiento se prevé para el año 2000. La ubicación de la unidad no se ha decidido, aunque estará dentro de Cans Brians o Quatre Camins.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En