Comienzan a demolerse las chabolas de San Fernando

El poblado chabolista cercano a la urbanización Los Berrocales, en San Fernando de Henares, comenzó ayer a caer bajo los golpes de la piqueta. La Consejería de Obras Públicas de la Comunidad de Madrid procedió a demoler 11 de las 46 chabolas construidas desde 1985 en el margen derecho de la carretera M-115, a cien metros de la autovía de Barcelona (N-II). Los ocupantes de los chamizos derribados fueron realojados en pisos de tres dormitorios del Instituto de la Vivienda de Madrid en Coslada y San Fernando.Desde primera hora de la mañana, los moradores de las chabolas se afanaron en sacar a la ...

El poblado chabolista cercano a la urbanización Los Berrocales, en San Fernando de Henares, comenzó ayer a caer bajo los golpes de la piqueta. La Consejería de Obras Públicas de la Comunidad de Madrid procedió a demoler 11 de las 46 chabolas construidas desde 1985 en el margen derecho de la carretera M-115, a cien metros de la autovía de Barcelona (N-II). Los ocupantes de los chamizos derribados fueron realojados en pisos de tres dormitorios del Instituto de la Vivienda de Madrid en Coslada y San Fernando.Desde primera hora de la mañana, los moradores de las chabolas se afanaron en sacar a la calle sus enseres. Hacia las 11.00 comenzó el derribo, que se realizó bajo la vigilancia de efectivos de las Unidades de Intervención Policial y de agentes de la Policía Municipal. No hubo incidentes, aunque sí lamentos. El patriarca de las 50 familias allí residentes, Luis Dos Santos, señaló a Efe: "Para nosotros, los pisos son una cárcel. Nos dedicamos a la compra y venta de chatarra y cartón. Así nos ganamos la vida. A muchos les han dado viviendas en un tercer o cuarto piso. ¿Dónde van a almacenar el material?".

Las excavadoras también limpiaron los 600 metros cuadrados de terreno que, al otro lado de la carretera, utilizaban los chabolistas para almacenar chatarra, hierro y cobre. Esa misma zona fue devastada la semana pasada por un gran incendio.

Dos Santos también aseguró que el Ayuntamiento les prometió "una nave o terreno para almacenar la chatarra, pero, de momento, no sabemos nada". "Además", continuó, "los pisos nos los ceden en régimen de alquiler. Cuestan 12.000 pesetas mensuales, y muchas familias no disponen de ese dinero. Solicitaremos un alquiler más barato".

La responsable de Servicios Sociales de San Fernando, Marisol Fernández, de IU, explicó que las familias serán realojadas en distintos bloques y calles. Según el Ayuntamiento, los vecinos de los barrios donde irán estas personas conocen que allí serán trasladados los chabolistas. El realojo del resto de familias se realizará gradualmente a partir de septiembre y hasta junio de 1999, según un convenio firmado por la Consejería de Obras Públicas y el Consorcio para el Realojo de la Población Marginada.