Una cumbre institucional secreta da luz verde a la financiación del Kursaal

Los problemas de financiación del Kursaal han entrado en una fase de resolución tras la reunión secreta que mantuvieron el pasado miércoles el diputado general, Román Sudupe; el alcalde de San Sebastián, Odón Elorza, y el presidente de la Kutxa, Fernando Spagnolo, en el palacio foral. Ayer, ninguno de ellos quiso pronunciarse sobre los contenidos del cónclave e incluso alguno llegó a desmentir que se hubieran reunido. Uno de los participantes se escudó en el pacto de silencio "para no estropear las cosas". El principio de acuerdo alcanzado por los tres mandatarios, según fuentes conocedoras d...

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Los problemas de financiación del Kursaal han entrado en una fase de resolución tras la reunión secreta que mantuvieron el pasado miércoles el diputado general, Román Sudupe; el alcalde de San Sebastián, Odón Elorza, y el presidente de la Kutxa, Fernando Spagnolo, en el palacio foral. Ayer, ninguno de ellos quiso pronunciarse sobre los contenidos del cónclave e incluso alguno llegó a desmentir que se hubieran reunido. Uno de los participantes se escudó en el pacto de silencio "para no estropear las cosas". El principio de acuerdo alcanzado por los tres mandatarios, según fuentes conocedoras de lo tratado en la reunión, delimita el papel que va a desempeñar cada institución respecto a los dos contenciosos que ahora ensombrecen el proyecto de Rafael Moneo: la necesidad de encontrar 1.800 millones de pesetas para acabar la obra y el futuro de la sala de exposiciones. Ambas incógnitas se despejarán públicamente en breve, quizás mañana mismo, cuando se reúna el Consejo de Administración de la sociedad Kursaal, en el que participan representantes del Ayuntamiento y de la Diputación. La incertidumbre sobre el desfase presupuestario para culminar la construcción de los cubos de Moneo está resuelta, en la medida que la Diputación tiene una firme "voluntad política" de aportar los recursos que sean necesarios. La institución foral, que ya ha invertido 2.000 millones en el proyecto durante los tres últimos años, quiere coliderar el proyecto, en el que se siente tan implicado como el Ayuntamiento, aunque discrepe de determinados planteamientos municipales y, sobre todo, de algunas actitudes del alcalde, Odón Elorza, a la hora de comprometer a la Diputación. Salvado el escollo de la financiación, cuyos términos se concretarán en las próximas semanas, el otro punto de discordia gira sobre la sala de exposiciones del Kursaal, para la que existen cuatro alternativas: el alquiler, la venta, el alquiler con opción de compra (leasing) a la Kutxa, o su explotación por la sociedad Kursaal. El desencuentro entre el Ayuntamiento, que estaría dispuesto a la venta por 775 millones de pesetas, y la última oferta de la entidad de ahorro, cifrada en 500 millones, podría superarse con un acuerdo con una cantidad intermedia, aunque fuentes autorizadas de la Kutxa mantienen que la sala no es una prioridad en su política cultural. En todo caso, los ingresos que pudieran obtenerse en el caso de que se venda la sala no se destinarían a cubrir el desfase presupuestario, sino a dotar de recursos a la sociedad Kursaal para la gestión ordinaria del Palacio de Congresos y el Auditorio. De hecho, un avance de programación encargado por el Ayuntamiento cifra el déficit anual en una cifra próxima a los 200 millones de pesetas. Por otra parte, la Ejecutiva del PNV en Guipúzcoa se reunirá hoy con sus representantes en el Ayuntamiento y la Diputación para unificar criterios ante la reunión que celebra mañana el Consejo de Administración del Kursaal

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