La Diputación de Málaga y SAS se culpan del conflicto con toxicómanos
Las administraciones cruzan acusaciones y los toxicómanos pagan los platos rotos. Según ha denunciado el sindicato CCOO, los drogadictos malagueños en rehabilitación tienen que abonar medicamentos de su bolsillo porque las recetas que les extienden en el Servicio de Drogodependencia, dependiente de Diputación, no son con cargo a la Seguridad Social. La institución supramunicipal y el Servicio Andaluz de Salud (SAS) se han culpado recíprocamente de la situación. El diputado popular José Egea acusó a la delegación de Salud de haber hecho caso omiso a las tres cartas remitidas en el último año e...
Las administraciones cruzan acusaciones y los toxicómanos pagan los platos rotos. Según ha denunciado el sindicato CCOO, los drogadictos malagueños en rehabilitación tienen que abonar medicamentos de su bolsillo porque las recetas que les extienden en el Servicio de Drogodependencia, dependiente de Diputación, no son con cargo a la Seguridad Social. La institución supramunicipal y el Servicio Andaluz de Salud (SAS) se han culpado recíprocamente de la situación. El diputado popular José Egea acusó a la delegación de Salud de haber hecho caso omiso a las tres cartas remitidas en el último año en las que le reclamaba una solución y ha optado por acudir al Defensor del Pueblo. "¿Si los drogadictos son enfermos por qué no se les receta con cargo a la Seguridad Social como a los demás?", se preguntó. El dirigente popular se defendió así de los ataques que CCOO hizo a su gestión y replicó: "No hemos echado el asunto en el olvido; Salud, que no nos ha dado ninguna contestación". Desorganización La respuesta del delegado provincial no se hizo esperar. Jaime Alonso Oliva, responsabilizó del problema al diputado "porque desorganizó un sistema que funcionaba bien" y que permitía a los médicos del servicio emitir recetas con cargo a la Seguridad Social. Alonso aclaró que de todos modos, aunque el procedimiento es más engorroso, los pacientes pueden acudir al médico de cabecera para que les "copie" la receta como se hace en las otras provincias de la comunidad autónoma. Hasta hace un par de años, el servicio estaba a cargo de un médico al que el SAS reconocía las recetas, pero Egea colocó al frente de la dirección a una psicóloga. "Y yo no puedo otorgar capacidad de recetar a una psicóloga. El problema lo tiene que resolver quien lo ha creado", se excusó el delegado. El martes, el sindicato arremetió contra la gestión de Egea y denunció listas de espera de más de un mes para iniciar un tratamiento de desintoxicación así como seguimiento insuficiente de los pacientes que ya están en un programa de deshabituación por falta de personal. También en este apartado el diputado echó la pelota a la Junta. "La asistencia reconozco que está saturada porque en dos años el programa de metadona ha duplicado el número de enfermos. Por eso vengo reclamando desde hace tiempo a la Junta más apoyo económico", apuntó. Según el convenio entre la administración andaluza y la Diputación, la primera aporta 91 millones y la segunda 217 millones.