El Gobierno resta importancia al empeño del Parlamento europeo de quitar a España el Fondo de Cohesión

El portavoz del Gobierno, Miguel Ángel Rodríguez, restó ayer importancia a la aprobación por el Parlamento europeo, el jueves, de un informe que pide la supresión del Fondo de Cohesión para España, Portugal e Irlanda, tres países que han accedido al euro, pero que lo mantiene para Grecia, que no introducirá, por ahora, la moneda única."No es posible quitar los fondos de cohesión a España", afirmó Rodríguez en la rueda de prensa celebrada tras el Consejo de Ministros, informa Europa Press. "Si alguien quisiera cambiar esos requisitos, habría que cambiar los tratados, y para cambiar los tratados...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

El portavoz del Gobierno, Miguel Ángel Rodríguez, restó ayer importancia a la aprobación por el Parlamento europeo, el jueves, de un informe que pide la supresión del Fondo de Cohesión para España, Portugal e Irlanda, tres países que han accedido al euro, pero que lo mantiene para Grecia, que no introducirá, por ahora, la moneda única."No es posible quitar los fondos de cohesión a España", afirmó Rodríguez en la rueda de prensa celebrada tras el Consejo de Ministros, informa Europa Press. "Si alguien quisiera cambiar esos requisitos, habría que cambiar los tratados, y para cambiar los tratados, la reforma tendría que ser votada por los 15 parlamentos. Por tanto, no es posible quitar los fondos de cohesión".

La iniciativa de la Eurocámara generó cierta confusión en España. El Parlamento europeo no preconizó acabar con el conjunto de los fondos de cohesión, que incluyen también los llamados fondos estructurales, y ni siquiera abogó por disolver el Fondo de Cohesión, sino por dejarlo sólo para Grecia, dado que sus otros tres beneficiarios -España absorbe unos 170.000 millones de pesetas, la mitad de su presupuesto- disfrutarán del euro.

Dejar a Grecia como único recipiendario o reducir drásticamente la dotación presupuestaria del Fondo de Cohesión no requiere, según expertos en derecho comunitario, modificar previamente el Tratado de Maastricht, que creó ese fondo. Rodríguez insistió además en que la iniciativa de la Eurocámara no es vinculante jurídicamente. Sólo tiene un cierto valor político.

La decisión de la Eurocámara suscitó un sinfín de reacciones de la oposición socialista y de los sindicatos, pero al cierre de esta edición no se había pronunciado ningún miembro de Izquierda Unida. Este grupo parlamentario impidió que prosperase una moción de consenso, fraguada entre socialistas y conservadores europeos, que no hubiese sido tan perjudicial para España. El presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, recalcó, por ejemplo, que se ha puesto de relieve el deseo alemán de reducir su aportación a las arcas comunitarias.

Archivado En