Un organismo independiente
La Agencia de Protección de Datos fue creada en 1992 mediante la Ley Orgánica de Regulación del Tratamiento Automatizado de Datos de Carácter Personal (LORTAD). Tiene personalidad jurídica propia y actúa con independencia de la Administración, si bien se nutre, lógicamente, de los Presupuestos Generales.El director de la Agencia es nombrado por el Gobierno, y tiene un mandato de cuatro años. Juan José Martín Casallo, el actual director, fue nombrado por el Gobierno socialista, y ya ha concluido su mandato oficial (actualmente desempeña el cargo en funciones).
El máximo responsable de la...
La Agencia de Protección de Datos fue creada en 1992 mediante la Ley Orgánica de Regulación del Tratamiento Automatizado de Datos de Carácter Personal (LORTAD). Tiene personalidad jurídica propia y actúa con independencia de la Administración, si bien se nutre, lógicamente, de los Presupuestos Generales.El director de la Agencia es nombrado por el Gobierno, y tiene un mandato de cuatro años. Juan José Martín Casallo, el actual director, fue nombrado por el Gobierno socialista, y ya ha concluido su mandato oficial (actualmente desempeña el cargo en funciones).
El máximo responsable de la Agencia ha de formar parte previamente del Consejo Consultivo de ese organismo, en el que se integran un diputado, un senador, un representante de la Administración central designado por el Gobierno, un representante de las administraciones locales, un miembro de la Real Academia de la Historia, un experto en la materia (propuesto por el Consejo de Universidades), un representante de las asociaciones de consumidores, un representante de las comunidades autónomas y un representante de las empresas de ficheros privados. La elección de cada uno de los miembros viene dada por distintos reglamentos.
La Agencia tiene potestad de imponer sanciones de hasta 100 millones por incumplimientos de la LORTAD. Una de sus funciones consiste en inmovilizar ficheros en los, supuestos constitutivos de infracción muy grave, y requerir a sus responsables que cesen en el uso o cesión ilícita de los datos.
La Agencia ha impuesto ya diversas sanciones, además de las que han recaído recientemente en la propia Compañía Telefónica. En 1966 (con más de 1.000 denuncias recibidas), fueron multadas, entre otras entidades, Renfe (50 millones de pesetas) y varias empresas de cobro de morosos, así como un periódico de Madrid que cedió a una entidad financiera los datos de sus lectores obtenidos mediante un concurso. En 1995 las multas ascendieron (con un total de 30 expedientes de sanción) a 177 millones de pesetas.