Bien atado

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Los más de 60 socios de la ONG del Colegio Calasancio lo tienen todo bien atado. La han registrado en el Ministerio del Interior y siempre se aseguran de que el dinero que mandan a cada proyecto llega de verdad. Lo dirigen a un representante oficial del país de destino, con la supervisión de otras dos personas que tengan relación con el proyecto. Entre cuotas de los socios (2.500 pesetas al año), donativos y actividades para recaudar fondos, esta ONG reúne dos millones de pesetas al año.Las becas es otro de sus objetivos propietarios. Han becado a un grupo de estudiantes de posgrado de Ecuador, con la condición de que devuelvan el dinero cuando trabajen para financiar a su vez los estudios de otros jóvenes. También ayudan a estudiar a 40 alumnos del Colegio Atalaya de Venezuela y a un estudiante de la Escuela de Formación Agraria de Castilla La Mancha, hijo de una prostituta canaria que se trajo el director del colegio a la península para que se pudiera formar.