La poderosa AFL-CIO califica a UPS de "empresa avara" y ofrece su apoyo económico a los camioneros en huelga
La huelga del verano en Estados Unidos lleva camino de enquistarse y endurecerse. Ayer, en el noveno día de paro de los 185.000 camioneros de la empresa de mensajería rápida UPS, la gran confederación sindical estadounidense, AFL-CIO, ofreció su apoyo económico a los huelguistas. La empresa había amenazado el día anterior con despedir a 15.000 empleados si los camioneros no vuelven al trabajo.AFL-CIO agrupa a 78 grandes sindicatos de todo el país y su declaración irá acompañada de ayuda económica a los camioneros para que puedan prolongar el conflicto. El presidente de la confederación, John S...
La huelga del verano en Estados Unidos lleva camino de enquistarse y endurecerse. Ayer, en el noveno día de paro de los 185.000 camioneros de la empresa de mensajería rápida UPS, la gran confederación sindical estadounidense, AFL-CIO, ofreció su apoyo económico a los huelguistas. La empresa había amenazado el día anterior con despedir a 15.000 empleados si los camioneros no vuelven al trabajo.AFL-CIO agrupa a 78 grandes sindicatos de todo el país y su declaración irá acompañada de ayuda económica a los camioneros para que puedan prolongar el conflicto. El presidente de la confederación, John Sweeney, declaró que UPS "es una companía avara, que quiere aumentar sus beneficios a costa de los trabajadores".
"Su combate es nuestro combate y su huelga es nuestra huelga", añadió Sweeney en referencia a los camioneros del gigante mundial del reparto urgente, que exigen mayores retribuciones y, sobre todo, creación de puestos de trabajo a jornada completa.
Por su parte, el presidente del sindicato de los camioneros, Ron Carey, convertido por el conflicto en un personaje de notoriedad nacional, calificó de "intimidación" y "amenaza" la declaración de la dirección de la compañía de que despedirá a 15.000 personas si la huelga se prolonga hasta el viernes. Según la propia empresa, UPS ha perdido por la huelga 300 millones de dólares (unos 46.000 millones de pesetas).