BULA GANADERA

Los patronos del campo extremeño y los invitados a una degustación de carne de ternera de la dehesa comieron plácidamente y con la conciencia tranquila, pese a ser Viernes de Dolores, que, ya se sabe, invita a la abstinencia y a luchar contra la gula. Ocurrió ayer en la feria Expocáceres. La organización Asaja había programado la degustación en uno de los muchos intentos que hacen los ganaderos por recuperar un mercado que se viene abajo desde el caso de las vacas locas. Pero algunos militantes de Asaja, organización que aglutina a buena parte de los grandes empresarios del campo, se llevaron ...

Los patronos del campo extremeño y los invitados a una degustación de carne de ternera de la dehesa comieron plácidamente y con la conciencia tranquila, pese a ser Viernes de Dolores, que, ya se sabe, invita a la abstinencia y a luchar contra la gula. Ocurrió ayer en la feria Expocáceres. La organización Asaja había programado la degustación en uno de los muchos intentos que hacen los ganaderos por recuperar un mercado que se viene abajo desde el caso de las vacas locas. Pero algunos militantes de Asaja, organización que aglutina a buena parte de los grandes empresarios del campo, se llevaron las manos a la cabeza. "¡Viernes de Dolores y comer, imposible!", se dijeron los ganaderos más dados a mantener la tradición. Y en éstas, Alfonso Sánchez Ocaña, el espabilado gerente de Asaja, tuvo la idea: "Con pedir dispensas lo arreglarnos". Dicho y hecho. Carta al obispado, retahila detallando las penurias del vacuno y el bueno del obispo de Coria-Cáceres, Ciriaco Benavente que no tuvo inconveniente en otorgar la bula. Y ayer todos comieron felices y bendecidos por la Iglesia-