González: "La entrada en el euro se basará en motivos políticos"
La decisión de acceso a la moneda única, prevista para 1999, "será política y no estrictamente basada en motivos económicos". Felipe González lo dijo con esta contundencia ayer ante los empresarios y profesionales que asisten a la XVII Reunión de Círculo de Economía.El ex presidente del Gobierno y líder del PSOE agregó: "No comparto la idea de que cada país tiene que apretar los dientes, no mirar a ningún lado y decir que nuestro destino es neutro. Sin duda se van a tener en cuenta las condiciones económicas, pero la decisión será política".
El líder del PSOE aprovechó para pedir al Gob...
La decisión de acceso a la moneda única, prevista para 1999, "será política y no estrictamente basada en motivos económicos". Felipe González lo dijo con esta contundencia ayer ante los empresarios y profesionales que asisten a la XVII Reunión de Círculo de Economía.El ex presidente del Gobierno y líder del PSOE agregó: "No comparto la idea de que cada país tiene que apretar los dientes, no mirar a ningún lado y decir que nuestro destino es neutro. Sin duda se van a tener en cuenta las condiciones económicas, pero la decisión será política".
El líder del PSOE aprovechó para pedir al Gobierno que busque países que apoyen políticamente a España para estar desde el principio en el euro. "Hay que mirar alrededor para ver si tenemos una masa crítica favorable, y no mirar despectivamente alrededor", dijo.
González citó "cuatro escenarios" posibles para el nacimiento del euro: que acabe retrasándose, que sólo acceda un grupo reducido de países, que accedan todos o que se adelante un ano, a enero de 1998.
El líder del PSOE no defendió el adelantamiento explícitamente. Se limitó a decir que tendría "ventajas e inconvenientes". Entre las ventajas, que "cogería a contrapié a sus críticos". "No se asusten", dijo a los asistentes. "Si no pensara que mi país podría estar en eso sería una tontería proponerlo, porque para mí es prioritario mi país".
González recordó que el Tratado de Maastricht permite adelantar el euro, aunque "eso plantea dificultades políticas muy serias y también técnicas" a los bancos centrales y las entidades financieras privadas.
Otra ventaja, según González, es que en el Reino Unido, país con un fuerte recelo hacia el euro, "el Gobierno que saldrá de las urnas a finales de mayo quizá haga cosas [tomar la decisión de entrar] en el periodo de gracia de 100 días que en periodo de euroescepticismo no podría hacer".