Cartas al director

Los brigadistas

Cuando los ecos de la última guerra civil española sólo sean unas líneas olvidadas en cualquier libro de historia. Cuando de los seres humanos que padecieron, provocaron, lucharon, perdedores y supuestos vencedores, apenas queden unas cuantas cenizas mezcladas con la tierra. Cuando no quede ni el recuerdo, siempre habrá quien relate la historia de unos jóvenes que se ofrecieron gustosos en defensa de unos ideales. Venidos de los más recónditos lugares, combatieron, rieron, ayudaron y muchos murieron. Lo dieron todo sin pedir nada: sabido es que la libertad no se pide, se exige.Pero fueron ...

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Cuando los ecos de la última guerra civil española sólo sean unas líneas olvidadas en cualquier libro de historia. Cuando de los seres humanos que padecieron, provocaron, lucharon, perdedores y supuestos vencedores, apenas queden unas cuantas cenizas mezcladas con la tierra. Cuando no quede ni el recuerdo, siempre habrá quien relate la historia de unos jóvenes que se ofrecieron gustosos en defensa de unos ideales. Venidos de los más recónditos lugares, combatieron, rieron, ayudaron y muchos murieron. Lo dieron todo sin pedir nada: sabido es que la libertad no se pide, se exige.Pero fueron apartados de la contienda, olvidados luego y algunos perseguidos. Cuántos brigadistas no harían falta ahora para defender a zaireños, ruandeses, afganos, chechenos, palestinos...-

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