La igualdad de la mujer en Africa ayudaría a frenar las migraciones

Demógrafos mediterráneos califican de "éxodo bíblico" los movimientos actuales

Las migraciones desde los países del Norte de África hacia Europa configuran la cuestión más compleja de todo el milenio, no sólo de nuestra era. "Son como un éxodo bíblico, que requiere una política de solidaridad y estrategias para evitar tensiones sociales". Esta advertencia la expuso ayer Salvatore di Staso, representante del Consejo de Poderes Locales y Regionales, en la Conferencia Mediterránea sobre migraciones, población y desarrollo que se celebra en Palma bajo los auspicios del Consejo de Europa. El drama de las pateras -que comparten España, Malta, Italia y algunas islas griega...

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Las migraciones desde los países del Norte de África hacia Europa configuran la cuestión más compleja de todo el milenio, no sólo de nuestra era. "Son como un éxodo bíblico, que requiere una política de solidaridad y estrategias para evitar tensiones sociales". Esta advertencia la expuso ayer Salvatore di Staso, representante del Consejo de Poderes Locales y Regionales, en la Conferencia Mediterránea sobre migraciones, población y desarrollo que se celebra en Palma bajo los auspicios del Consejo de Europa. El drama de las pateras -que comparten España, Malta, Italia y algunas islas griegas- flotaba en el ambiente del congreso, centrado en cuestiones académicas y en reflexiones estructurales. El demógrafo español Juan Salcedo, rector de la Universidad Europea de Madrid, apuntó la necesidad de que "la mujer en el Norte de África consiga jugar el papel de igualdad que le corresponde. La bajada de la fecundidad -como ha ocurrido en el arco sur de Europa- vendrá cuando las mujeres subordinen su papel tradicional de madre al de persona activa en el mundo laboral". Salcedo cree que "no se trata tan sólo de frenar la subida hacia el norte, sino entender desde ya que no se puede pretender permanecer en un polo de riqueza rodeado por una área de extrema pobreza". "Preocuparse sólo de la integración de los inmigrantes es facilitar que el proceso siga de la misma manera. Es preciso crear riqueza y ayudar a que logren la dignidad vital suficiente en sus propios países y no tengan la necesidad de emigrar", matizó Salcedo.Desequilibrios

La conquista de la igualdad social y laboral de la mujer con el hombre, como un derecho humano fundamental, en el camino del desarrollo democrático pluralista, se verá ayudado por el empuje que aporte la creación de nuevas áreas de actividad económica mediante la cooperación activa de los países ricos del norte en el pobre sur, según observación de Robin Guthrie, director de Asuntos Sociales y Económicos del Consejo de Europa. La alemana Charlotte Höhn, del Comité de Población Europeo, abundó en la posible alternativa paliativa de las migraciones con la incorporación de la mujer en el mercado laboral de los países emisores de emigrantes. Reflexionó sobre los desequilibrios generados por la '"falta de fertilidad" entre el Norte y el Sur y aventuró que en un abanico de treinta años se pueden constatar los efectos de un declive en la natalidad en el norte de África, con una eventual bajada en la tasa de mano de obra joven.

La lucha contra la emigración clandestina para evitar, además, la explotación de la mano de obra inmigrada, barata e ilegal en Europa, fue reclamada por Manuela Aguiar, de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa, quien reseñó "los resultados trágicos", el "ambiente de xenofobia" que han desencadenado "políticos racistas, extremistas y sin escrúpulos".

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