Entrevista:

"Alcalá reune la memoria y la creación"

Hernán Crespo, un arquitecto de 58 años y director de Cultura de la Unesco, ocupa el último lugar en una lista muy importante para Alcalá de Hepares, la de aquellos que han manifestado su apoyo a la petición que el Ayuntamiento y la Universidad formularán a la organización internacional para la defensa de la educación y la cultura para que declaren la ciudad cervantina Patrimonio de la Humanidad. Antes que él apostaron por la candidatura el director del Instituto Español de Arquitectura, Joaquín Ibáñez, el consejero de Cultura, Gustavo Villapalos, y el presidente autonómico, Alberto Ruiz-Galla...

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Hernán Crespo, un arquitecto de 58 años y director de Cultura de la Unesco, ocupa el último lugar en una lista muy importante para Alcalá de Hepares, la de aquellos que han manifestado su apoyo a la petición que el Ayuntamiento y la Universidad formularán a la organización internacional para la defensa de la educación y la cultura para que declaren la ciudad cervantina Patrimonio de la Humanidad. Antes que él apostaron por la candidatura el director del Instituto Español de Arquitectura, Joaquín Ibáñez, el consejero de Cultura, Gustavo Villapalos, y el presidente autonómico, Alberto Ruiz-Gallardón.Crespo es ecuatoriano y reside en París, desde donde contesta por teléfono a las preguntas desde aquí formuladas. Sólo ha visitado Alcalá dos veces, invitado por su universidad, pero conoce bien su historia y monumentos.

Pregunta. ¿Con qué argumentos puede solicitar Alcalá la declaración?

Respuesta. Su historia: Cisneros, la Biblia Políglota, la Gramática de Nebrija o Cervantes. Además, se ve que hay un afán, tanto de la universidad, cuanto del municipio, para recuperar esa memoria que está un poco velada por las imposiciones de la historia: la desacralización de los bienes o la utilización de los edificios universitarios para otros fines, ejemplo. de rehabilitación urbana.

P. Usted afirmó que Alcalá podría tener el título para el quinto centenario de la Universidad (1999), ¿en qué se basaba?

R. Puede ser, si se unen la Universidad, el Ayuntamiento y la ciudad y el Estado lo propone. Pero yo no puedo asegurarle nada, mi opinión es la de un funcionario de la Unesco y un funcionario con experiencia en este campo, nada más.

P. ¿Fijaría usted su residencia en una casa situada en un casco histórico Patrimonio de la Humanidad?

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R. Sí, claro, hay mucho donde reencontrarse. Tales edificios están cargados de historia y de humanidad.

P. Y de problemas para hacer cualquier tipo de obra.

R. Lo importante es justamente facilitar eso. La declaración tiene que ser positiva para los habitantes, no una carga. Para conseguir que perviva la historia hay que dar facilidades, a través de exenciones de impuestos o subvenciones, a los dueños de los edificios para que los rehabiliten. Si no, ayudaremos a que se vayan deteriorando y desaparezcan.

P. ¿Qué es lo que más le ha impresionado de Alcalá?

R. La vida del casco histórico impostada dentro de una ciudad moderna y de un proyecto de universidad contemporánea, es decir, la reunión de la memoria y la creación.

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