Condenada una enfermera que transfundió sangre con virus del sida a un paciente

A. M. I. A, enfermera del hospital Valdecilla, de la Seguridad Social, ha sido condenada por el Juzgado de lo Penal número 2 a siete meses de prisión y suspensión en el ejercicio de su profesión por un delito de imprudencia temeraria que costó la vida al médico José M. Ríos, de 46 años, padre de tres hijos. Este, residente en Burgos, donde era jefe del servicio de Análisis Clínicos del hospital General Yagüe, fue intervenido quirúrgicamente en Valdecilla y la enfermera por error le trasfundió un concentrado de plaquetas contaminadas con el virus del sida.

La operación, un autotraspl...

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A. M. I. A, enfermera del hospital Valdecilla, de la Seguridad Social, ha sido condenada por el Juzgado de lo Penal número 2 a siete meses de prisión y suspensión en el ejercicio de su profesión por un delito de imprudencia temeraria que costó la vida al médico José M. Ríos, de 46 años, padre de tres hijos. Este, residente en Burgos, donde era jefe del servicio de Análisis Clínicos del hospital General Yagüe, fue intervenido quirúrgicamente en Valdecilla y la enfermera por error le trasfundió un concentrado de plaquetas contaminadas con el virus del sida.

La operación, un autotrasplante de médula ósea, se llevó a cabo con éxito en octubre de 1992, requiriendo el enfermo con posterioridad algunas trasfusiones de sangre. La ATS ahora condenada se equivocó en el banco de sangre a la hora de marcar la bolsa, gravísima confusión descubierta al día siguiente por el jefe del servicio; dos meses más tarde aparecieron los anticuerpos positivos, entrando el médico en una penosa depresión que se prolongó durante largos meses hasta su muerte en junio de 1994. En la última fase de su vida quedó ciego y sufrió una progresiva pérdida de conciencia.

Durante el juicio la defensa, ejercida por el abogado Benito Huerta, acusó al hospital Valdecilla de mantener en 1992 su banco de sangre en condiciones precarias, pero la dirección médica puntualizó que aquél funcionaba antes y ahora con los máximos controles y una carencia prácticamente total de errores.

La sentencia hace responsable civil directa a la compañía de seguros La Unión y el Fénix y responsables subsidiarios a la Diputación Regional y el Insalud.

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