Cartas al director

Sistema sanitario

Hago referencia al artículo sobre la salud de los: madrileños titulado El PP gasta 14 millones en una encuesta de salud que obvia el sida y las drogas, publicado en EL PAÍS.Al leer la noticia, en la que se dice que los madrileños perciben su estado de salud como bueno o muy bueno, mi reacción ha sido pensar: "Menos mal que tenemos buena salud, porque, de lo contrario, con el sistema sanitario que tenemos, estaríamos todos muertos".

Esta opinión está basada en el siguiente caso: en marzo de 1992, en el hospital de la Princesa, me intervinieron quirúrgicamente de unos miomas en el ...

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Hago referencia al artículo sobre la salud de los: madrileños titulado El PP gasta 14 millones en una encuesta de salud que obvia el sida y las drogas, publicado en EL PAÍS.Al leer la noticia, en la que se dice que los madrileños perciben su estado de salud como bueno o muy bueno, mi reacción ha sido pensar: "Menos mal que tenemos buena salud, porque, de lo contrario, con el sistema sanitario que tenemos, estaríamos todos muertos".

Esta opinión está basada en el siguiente caso: en marzo de 1992, en el hospital de la Princesa, me intervinieron quirúrgicamente de unos miomas en el útero. A finales de febrero, y tras llevar dos semanas con dolores agudos en el abdomen, decidí ir a mi médico de cabecera para que autorizara la revisión que me aconsejaron realizar cada dos años.

Cuando el día 6 de marzo me presento en el hospital de la Princesa para solicitar la cita, la información que aparecía adosada a la pared decía que la especialidad de ginecología no daba citas, e indicaban que se llamara a un numero de teléfono. Llamé y me indicaron que el ordenador no tenía cargado el segundo semestre, y, por tanto, que hasta el mes de abril no me podrían dar cita. También muy amablemente me señalaron que no llamara muy entrado abril porque corría el riesgo de que se acabasen las citas del segundo semestre.

A mediados de mes, mis dolores no disminuían y volví a ir al médico de cabecera, quien entonces procedió a someterme a unas pruebas analíticas y descartar una posible infección de orina. Yo le indiqué al médico, la conveniencia de que me viera el ginecólogo de zona, ya que la revisión en el hospital de la Princesa no sería antes de julio. El médico me contestó que el ginecólogo de la zona de San Blas estaba dando hora para enero de 1997, pero que me iba a solicitar una exploración ecográfica. Será el 21 de octubre.

Con estos datos, entiendo perfectamente que las urgencias de todos los centros hospitalarios estén atestadas de enfermos. No hay derecho a que nos traten así y que para estar medianamente atendidos tengamos que contratar la asistencia sanitaria con empresas particulares. Estoy convencida de que el sistema sanitario no se soluciona porque hay intereses particulares que lo impiden.-

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