Las amenazas a funcionarios de prisiones

He podido leer en EL PAÍS de 20 de marzo la noticia sobre las amenazas de ETA contra los funcionarios de prisiones afiliados al sindicato ELA-STV. Como funcionario de prisiones -colectivo directamente amenazado por esta organización- y como miembro de un sindicato -CC OO- me siento implicado en esta estrategia del miedo y querría hacer las siguientes consideraciones.1. Los funcionarios de prisiones son el último escalón -el más débil- de la política penitenciaria del Gobierno.

2. Los funcionarios de prisiones no somos un "colectivo represor fruto del régimen anterior" como...

He podido leer en EL PAÍS de 20 de marzo la noticia sobre las amenazas de ETA contra los funcionarios de prisiones afiliados al sindicato ELA-STV. Como funcionario de prisiones -colectivo directamente amenazado por esta organización- y como miembro de un sindicato -CC OO- me siento implicado en esta estrategia del miedo y querría hacer las siguientes consideraciones.1. Los funcionarios de prisiones son el último escalón -el más débil- de la política penitenciaria del Gobierno.

2. Los funcionarios de prisiones no somos un "colectivo represor fruto del régimen anterior" como aún algunos nos quieren pintar. Somos un colectivo joven -el 80% empezó a trabajar después de 1975- y nos creemos la Ley Orgánica Penitenciara que fija como fin último la reinserción.

3. Los funcionarios de prisiones no distinguimos a los internos por su delito ni su condena. No somos jueces ni creemos en la existencia de "presos políticos". En este país, afortunadamente, ya nadie es condenado por sus ideas.

4. Los funcionarios de prisiones entendemos que cualquiera que no comulga con las ideas de ETA y su entorno es su enemigo, sea político, maestro, magistrado o lleve algún uniforme, y que por tanto quien ha de "cambiar de estrategia" no somos nosotros, sino ellos.

5. Muchos funcionarios de prisiones hemos luchado y seguimos luchando, desde el ámbito sindical, político o asociativo, por los derechos y libertades de nuestro pueblo. Cuando necesitemos lecciones de alguien ya las pediremos.

6. Por favor, liberad ya a José A. Ortega Lara. Él sí que es un rehén político, sufre torturas, humillaciones y está encarcelado injustamente. No ha tenido juicio ni abogados, no puede ver a la familia, ni recibir cartas, ni llamar por teléfono, ni tiene todas las garantías que la Constitución, que tanto despreciáis, ofrece a vuestros presos.-