Acuerdo para que el Rey no abra las Cortes hasta que Aznar sea presidente

La nueva Mesa del Congreso decidió ayer, en su primera reunión y sin oposición alguna, que la sesión solemne de apertura de la legislatura, presidida por el Rey, no se celebre hasta después de la investidura del jefe del Gobierno. Con un cumplimiento estricto del reglamento, la sesión debería celebrarse dentro de dos semanas. Por tanto, con escasas posibilidades de que José María Aznar sea ya presidente y con Felipe González y su Gobierno en funciones sentado todavía en el banco azuL

La Mesa del Congreso, en su primera reunión tras la constitución de las Cámaras, ayer por la noche, deci...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

La nueva Mesa del Congreso decidió ayer, en su primera reunión y sin oposición alguna, que la sesión solemne de apertura de la legislatura, presidida por el Rey, no se celebre hasta después de la investidura del jefe del Gobierno. Con un cumplimiento estricto del reglamento, la sesión debería celebrarse dentro de dos semanas. Por tanto, con escasas posibilidades de que José María Aznar sea ya presidente y con Felipe González y su Gobierno en funciones sentado todavía en el banco azuL

Más información

La Mesa del Congreso, en su primera reunión tras la constitución de las Cámaras, ayer por la noche, decidió prorrogar en 15 días el plazo para celebrar la sesión solemne de apertura de la legislatura. La fecha límite para su celebración se sitúa ahora en el 6 de mayo. La decisión se adoptó por unanimidad, a pesar de que los parlamentarios reconocieron que la situación que ahora quiere evitarse se ha producido anteriormente, sin que ello fuera motivo de inquietud alguna.Sin embargo, en el Grupo Popular no habían ocultado su incomodidad por este asunto. No era un plato de gusto para José María Aznar que el Rey inaugurara solemnemente la legislatura con él sentado todavía en los escaños de la oposición y con Felipe González en el banco azul.

Con la prórroga acordada ayer, debe haber tiempo suficiente para que Aznar sea investido jefe del Ejecutivo antes de que el Rey dirija su discurso al nuevo Gobierno y a todos los representantes de la soberanía popular.

Tras algo más de dos horas de reunión, los miembros de la Mesa del Congreso elegidos por la mañana anunciaron su acuerdo unánime para modificar el calendario inicialmente previsto. El vicepresidente tercero, Josep López de Lerma (CiU), así lo anunció, haciendo referencia al respeto "a los distintos equilibrios institucionales".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

El nuevo presidente del Congreso, Federico Trillo, defendió esta tesis, esgrimiendo argumentos. constitucionales y con múltiples referencias a la institución monárquica. Los representantes socialistas Joan Marcet y Josep Beviá se basaron más en la previsión reglamentaria que permite prorrogar plazos a iniciativa de la Mesa del Congreso.

Los representantes de este órgano de gobierno de la Cámara no ocultaron en sus disquisiciones que ha habido precedentes, en concreto en 1982. Aunque los socialistas obtuvieron entonces mayoría absoluta, al contrario de lo que sucede a Aznar ahora, el Rey abrió la legislatura antes de que Felipe González fuese investido presidente del Gobierno y con el banco azul ocupado por Leopoldo Calvo Sotelo y sus ministros.

Apertura de consultas

La constitución de las Cámaras permite al Rey iniciar consultas para proponer candidato a presidente del Gobierno. Federico Trillo le comunicará hoy, oficialmente, la nueva composición del Congreso de los Diputados. Trillo solicitó audiencia a don Juan Carlos ayer, nada más tomar posesión de la presidencia de la Cámara, y hoy por la mañana visitará el palacio de La Zarzuela.

Después de esta audiencia, el Rey abrirá las consultas con todos los partidos políticos que han conseguido escaños. En ocasiones anteriores, el orden ha sido de menor a mayor representación.

Las consultas del jefe del Estado con los líderes de los partidos mayoritarios, Felipe González y José María Aznar, no se producirán previsiblemente hasta después de Semana Santa.

Tras conocer la disposición de los grupos políticos, el Rey volverá a recibir en audiencia al presidente de la Cámara para comunicarle su propuesta de candidato a la investidura. Si don Juan Carlos aprecia apoyo suficiente a José María Aznar y le propone como candidato nada más acabar las consultas, quedaría en manos de la Presidencia y de la Mesa del Congreso la fijación de la fecha para la investidura.

Sobre la firma

Archivado En