El Ejército de Zaire cerca un segundo campo de refugiados ruandeses

Tropas del ejército de Zaire cercaron ayer un segundo campo de refugiados ruandeses, al este del país. Es un paso más en la creciente presión del Gobierno zaireño para forzar la salida del millón de refugiados que salieron de Ruanda tras el genocidio de 1994. Los refugiados son, en su mayoría, de la etnia hutu mayoritaria en Ruanda, que huyeron tras las matanzas de tutsis y hutus moderados a manos de soldados y milicianos radicales hutus. Los refugiados argumentan que sus vidas corren peligro si vuelven a Ruanda, pues los tutsis les pasarían factura por las matanzas de 1994.Fuentes de las Naci...

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Tropas del ejército de Zaire cercaron ayer un segundo campo de refugiados ruandeses, al este del país. Es un paso más en la creciente presión del Gobierno zaireño para forzar la salida del millón de refugiados que salieron de Ruanda tras el genocidio de 1994. Los refugiados son, en su mayoría, de la etnia hutu mayoritaria en Ruanda, que huyeron tras las matanzas de tutsis y hutus moderados a manos de soldados y milicianos radicales hutus. Los refugiados argumentan que sus vidas corren peligro si vuelven a Ruanda, pues los tutsis les pasarían factura por las matanzas de 1994.Fuentes de las Naciones Unidas confirmaron ayer que un número indeterminado de soldados zaireños iniciaron al amanecer el cerco del campo de Nyangazi, en la, ciudad de Bukabu. El cerco supone la suspensión de todo tipo de actividad comercial dentro del campamento y es una medida previa a su cierre definitivo.

Este despligue de tropas se produce sólo tres días después de una operación similar en el campo de refugiados, de Kibumba, cerca de Goma, que no logró sus objetivos, pues los soldados zaireños sólo lograron expulsar del país a medio centenar de refugiados de los 190.000 que habitan allí. Unos 27.000 hutus ruandoses están refugiados en el campo de Nyangzi, según un portavoz de Naciones Unidas.

ACNUR. (el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados) ha intentado persuadir a los ruandeses para que vuelvan a sus hogares. Zaire acoge en total a medio millón de estos refugiados y amenaza con expulsarlos.

Por otra parte, una periodista británica de la BBC, Jane Standley, fue expulsada el jueves de Zaire, donde había realizado un reportaje sobre el campo de refugiados de Kibumba.

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