Major critica la propuesta laborista de reformar la Cámara de los Lores

El primer ministro británico, John Major, se declaró ayer incrédulo ante las propuestas de reforma de la Constitución británica que prepara el Partido Laborista. Major insinuó que es difícil que el partido de la oposición se atreva a afrontar una reforma que "cambiaría completamente la faz del Reino Unido y su propia unión". La batalla en tomo a la Constitución no escrita del país ha vuelto a calentarse tras el audaz discurso pronunciado el miércoles por el líder laborista, Tony Blair, en un acto celebrado en Londres en memoria de su antecesor, John Smith, fallecido en 1994.

Blair recla...

El primer ministro británico, John Major, se declaró ayer incrédulo ante las propuestas de reforma de la Constitución británica que prepara el Partido Laborista. Major insinuó que es difícil que el partido de la oposición se atreva a afrontar una reforma que "cambiaría completamente la faz del Reino Unido y su propia unión". La batalla en tomo a la Constitución no escrita del país ha vuelto a calentarse tras el audaz discurso pronunciado el miércoles por el líder laborista, Tony Blair, en un acto celebrado en Londres en memoria de su antecesor, John Smith, fallecido en 1994.

Blair reclamó la urgente necesidad de que la Cámara de los Lores deje de ser un lugar donde se sientan aquellos que han sido distinguidos por el azaroso privilegio de que hace 300 años uno de sus antepasados "fuera amante de un rey".La supresión de los derechos hereditarios de los aristócratas a ocupar un sitio en la Cámara alta es una de las primeras medidas que tomará un futuro Gobierno encabezado por Blair, antes de proceder a la reforma completa de dicha Cámara para convertirla en una Asamblea elegida. Por el bajo nivel de asistencia a la Cámara de los Lores podría pensarse que la pérdida de ese derecho no será excesivamente importante para los pares británicos. En la pasada legislatura, entre noviembre de 1994 y noviembre de 1995, unos 500 lores no asistieron ni a la mitad de las sesiones de la Cámara Alta. Otra de las. decisiones esenciales será convocar un referéndum para obtener el apoyo popular necesario para proceder a una reforma del sistema electoral -que pasaría a ser proporcional- en la Cámara de los Comunes. Además, el líder laborista renovó su compromiso con la fórmula descentralizadora, lo que significa un Parlamento autónomo para Escocia y una Asamblea para el País de Gales. Los laboristas incorporarán de inmediato la Convención Europea de Derechos Humanos a las leyes del país y se comprometen a redactar, con el consenso de todos los grupos, una declaración de derechos.