Plan conjunto de la UE y Croacia para atajar la crisis de Mostar
La Unión Europea (UE) presentará una resolución conjunta con el presidente de Croacia, Franjo Tudjman, para solucionar la crisis de Mostar, según anunció ayer en Zagreb la ministra italiana de Exteriores, Susanna Agnelli. La ciudad bosnia de Mostar, dividida. entre musulmanes y croatas, fue escenario el miércoles de violentas manifestaciones de ultranacionalistas croatas que intentaron linchar al administrador europeo, el alemán Hans Koschnik, en protesta por su plan de partición de la ciudad entre sus dos comunidades.Fuerzas españolas de la OTAN acudieron a pacificar la zona. Koschnik recibió...
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La Unión Europea (UE) presentará una resolución conjunta con el presidente de Croacia, Franjo Tudjman, para solucionar la crisis de Mostar, según anunció ayer en Zagreb la ministra italiana de Exteriores, Susanna Agnelli. La ciudad bosnia de Mostar, dividida. entre musulmanes y croatas, fue escenario el miércoles de violentas manifestaciones de ultranacionalistas croatas que intentaron linchar al administrador europeo, el alemán Hans Koschnik, en protesta por su plan de partición de la ciudad entre sus dos comunidades.Fuerzas españolas de la OTAN acudieron a pacificar la zona. Koschnik recibió en 1994 un mandato de dos años de la UE para que intentara reunificar Mostar, un bastión de los radicales croatas.
Alemania, potencia. protectora de Croacia, advirtió ayer a Tudjman por boca de su ministro de Exteriores, Klaus Kinkel, de que le hace "corresponsable de los acontecimientos". Kinkel dijo que el líder croata, un nacionalista a ultranza, "dispone de las oportunidades y la influencia" para detener la agitación.
Pese a las. advertencias de la Unión Europea y la OTAN y la firmeza alemana, la Presidencia croata condenó ayer en un comunicado el proyecto europeo de partición, por entender que favorece a los musulmanes. Zagreb se había. comprometido. previamente a aceptar el arbitraje europeo.
El plan que motivó la agresión multitudinaria contra Koschnik prevé tres distritos para cada comunidad y uno central compartido. "Como alemán no puedo aceptar una división como la de Berlín, ni tampoco que los musulmanes sigan viviendo en un gueto", dijo ayer el administrador europeo.