Largas colas en la verja por culpa de Schengen

El 15 de diciembre de 1994 los gibraltareños y los españoles que cruzan la verja del Peñón para llenar el depósito del cocheo hacer compras en la colonia tuvieron un respiro.Ese día, el Gobierno español suprimió el, doble control aduanero que había instaurado el 26 de octubre anterior para, en teoría, entorpecer los tráficos ilícitos, pero, en realidad, como medida de presión antes de la reunión anual ministerial sobre el porvenir de la colonia británica. Se acabaron entonces las largas colas para pasar del Peñón a La Línea.El respiro ha sido de corta duración. A finales de marzo entró en vigo...

El 15 de diciembre de 1994 los gibraltareños y los españoles que cruzan la verja del Peñón para llenar el depósito del cocheo hacer compras en la colonia tuvieron un respiro.Ese día, el Gobierno español suprimió el, doble control aduanero que había instaurado el 26 de octubre anterior para, en teoría, entorpecer los tráficos ilícitos, pero, en realidad, como medida de presión antes de la reunión anual ministerial sobre el porvenir de la colonia británica. Se acabaron entonces las largas colas para pasar del Peñón a La Línea.El respiro ha sido de corta duración. A finales de marzo entró en vigor el Acuerdo de Schengen entre siete países de la UE que suprimieron sus confines comunes al tiempo que reforzaban los externos.La verja se convirtió en frontera externa y la comprobación del pasaporte es desde entonces sistemática. Otra vez se han formado colas y no sólo para los automovilistas, sino para los peatones.

Cruzar puede llevar, según los gibraltareños, entre tres y cuatro horas; mientras fuentes oficiales españolas afirman que sólo en fin de semana, y en hora punta, puede llegar la espera a 120 minutos.

Londres, que ya se quejaba de que se exigiera pasaporte y no bastara un mero documento de identidad para cruzar la verja, ha protestado también por las demoras. David Davis, viceministro para Asuntos Europeos, se lamentó a mediados de abril ante su homólogo español', Carlos Westendorp, y también reclamó en Madrid el embajador David. Brighty.

"Hemos dejado claro ante el Gobierno español", declaró Davis el 3 de mayo ante la Cámara de los Comunes, "que no aceptaremos que la aplicación del convenio de Schengen sirva de pretexto para los retrasos en la frontera". "Es responsabilidad de los países de Schengen proporcionar el adecuado número de agentes en sus pues tos fronterizos ( ...) para evitar 'retrasos indebidos a lo! ciudadanos de la UE".

Las autoridades españolas reconocen que en ninguna otra de sus fronteras externas, ni siquiera Ceuta y Melilla, es tan lento el cruce, pero precisan que ningún otro territorio vecino a España o a la UE tiene montada, como Gibraltar, su principal actividad industrial sobre los tráficos ilícitos.