La primera casa de niños urbana abre en Vallecas con lista de espera

La primera casa de niños de la capital, que abrió hace 10 días en Vallecas, está al completo. Unos 50 niños entre uno y tres años ya cuelgan sus abrigos de una percha de colorines que identifican mediante una fotografía. Este centro, situado en el número 33 de la calle de Peña Amaya, fue inaugurado ayer por la Comunidad de Madrid, que ha invertido unos siete millones de pesetas en habilitar las aulas, pintadas y decoradas en tonos pastel; los cuartos de baño, adecuados a la altura de los pequeños; y el patio, con toboganes y juegos de vivos colores.

En lista de espera se encuentran...

La primera casa de niños de la capital, que abrió hace 10 días en Vallecas, está al completo. Unos 50 niños entre uno y tres años ya cuelgan sus abrigos de una percha de colorines que identifican mediante una fotografía. Este centro, situado en el número 33 de la calle de Peña Amaya, fue inaugurado ayer por la Comunidad de Madrid, que ha invertido unos siete millones de pesetas en habilitar las aulas, pintadas y decoradas en tonos pastel; los cuartos de baño, adecuados a la altura de los pequeños; y el patio, con toboganes y juegos de vivos colores.

En lista de espera se encuentran otros 30 niños, que confían poder asistir el próximo curso a clase durante tres horas y media, de 9.30 a 13.00, horario reducido que precisamente diferencia a las casas de niños de las escuelas infantiles.

El jefe de Educación Infantil de la Comunidad, Amador Sánchez, califica de gran éxito este primer ensayo en la ciudad, avalado con la experiencia de 55 casas de niños en funcionamiento en otros tantos pueblos de la región. "No pensábamos que íbamos a tener tanta demanda. El medio rural siempre es más fácil porque los niños disponen de una oferta más escasa que en la capital", asegura Sánchez.

El plazo de matrícula para el próximo curso se abrirá a finales de este mes. Para el mes de septiembre también estará en funcionamiento la Casa de Niños de Carabanchel, situada en el colegio Lope de Vega. El objetivo de estos centros es educar a los niños, siempre en horarío matinal, a través de los juegos.