Condenados los dueños de un local por negar la entrada a gitanos

El juez de paz de Iznalloz (Granada) ha condenado a los propietarios de la discoteca Miky Mouse a dos días de arresto por una falta de coacciones contra 21 jóvenes gitanos a los que impidieron acceder al local. La sentencia del juez José Luis Hernández-Carrillo, cartero de profesión, señala que no se puede generalizar sobre un grupo étnico las prevenciones que tenían los condenados hacia los clientes violentos.La sentencia reconoce que, en los lugares nocturnos, habitualmente acontecen altercados que "si no se controlan rápidamente pueden acarrear males mayores y dar al traste con la vi...

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El juez de paz de Iznalloz (Granada) ha condenado a los propietarios de la discoteca Miky Mouse a dos días de arresto por una falta de coacciones contra 21 jóvenes gitanos a los que impidieron acceder al local. La sentencia del juez José Luis Hernández-Carrillo, cartero de profesión, señala que no se puede generalizar sobre un grupo étnico las prevenciones que tenían los condenados hacia los clientes violentos.La sentencia reconoce que, en los lugares nocturnos, habitualmente acontecen altercados que "si no se controlan rápidamente pueden acarrear males mayores y dar al traste con la vida comercial del negocio". Pero añade que el derecho de admisión no se puede considerar como absoluto. Por ello, el juez considera que en el caso de la discoteca de Iznalloz "se ha acreditado la coacción al negar la entrada a determinadas personas". Por ello, añade, se debe castigar la conducta "de los dueños del local al generalizar la coacción a un determinado grupo de personas, cuando deberían haber individualizado".

Los hechos denunciados se remontan a julio pasado cuando, durante varios días, los dueños de la discoteca, Miguel Molina y María Luisa López, exigieron a los denunciantes 2.000 pesetas para entrar o que mostraran un carné de socio inexistente.

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