González descarta elecciones anticipadas y niega responsabilidad política en el 'caso GAL'

Felipe González reiteró ayer que no existe responsabilidad política del Gobierno en caso GAL y pidió "que quede de una vez claro, para no insistir en ello". En un intento de detener la caída de los mercados, el jefe del Ejecutivo descartó su dimisión o la convocatoria de elecciones anticipadas y aseguró que no hay motivo para la intranquilidad, puesto que la estabilidad del Gabinete está garantízada porel apoyo de CiU. Los agentes financieros no atendieron el llamamiento a la calma. Otro mensaje clave fue que la comparecencia, hoy en el Congreso, del ministrode Justicia e Interior. Juan Albert...

Felipe González reiteró ayer que no existe responsabilidad política del Gobierno en caso GAL y pidió "que quede de una vez claro, para no insistir en ello". En un intento de detener la caída de los mercados, el jefe del Ejecutivo descartó su dimisión o la convocatoria de elecciones anticipadas y aseguró que no hay motivo para la intranquilidad, puesto que la estabilidad del Gabinete está garantízada porel apoyo de CiU. Los agentes financieros no atendieron el llamamiento a la calma. Otro mensaje clave fue que la comparecencia, hoy en el Congreso, del ministrode Justicia e Interior. Juan Alberto Belloch, no aportará novedad alguna. El PP e IU criticaron la actitud de González y le calificaron de "obstáculo para salir de la "crisis" e "'inconsciente".

Para el presidente del Gobierno la petición de elecciones anticipadas del Partido Popular y de su líder, José María Aznar, no hace más que empeorar las cosas. En cuanto a la demanda de un pacto para facilitar la alternancia, razonó que nadie sensato facilita la llegada de otro proyecto político al poder, eso deben hacerlo los ciudadanos".Y "la mayoría de los ciudadanos prefiere la estabilidad que supone agotar la legislatura", aseguró González en una comparecencia ante los medios de comunicación de media hora, iniciada a la una de la tarde, tras el Consejo de Ministros. La reunión del Gabinete se adelantó un día por el calendario festivo.

González admitió que hay un clima de "desasosiego evidente", pero lo atribuyó a la existencia de "demasiados juicios paralelos, de demasiado ruido en el sisterna". La explicación fue acompañada de una apelación al fortalecimiento del principio de presunción de inocencia, clave en un Estado de derecho. "Ni impunidad, ni principio de culpabilidad" pidió.

En cuanto a la inestabilidad en los mercados, interpretó que guarda relación con el rumor, extendido el martes, de su propia dimisión, "que no tiene ningún fundamento". También negó reuniones de ningún "gabinete de crisis" desde la reapertura del caso GAL.

El presidente del Gobierno apeló a la renovación del compromiso público realizado ayer por el presidente de la Generafltat y líder de CiU, Jordi Pujol, de seguir apoyando al Gobierno central, como prueba de que la estabilidad no est4 en duda. González indicó que el apoyo de Pujol le consta porque mantiene con él frecuente contacto.

"Facilitar la recuperación"

La situación económica es buena, agregó. Se ha invertido la tendencia negativa del año pasado, lo que probablemente permita en el futuro un crecimiento por encima de la media europea y, por primera vez en muchos años, quiza se reduzca el paro en el mes de diciembre.

Pero es verdad que existe "alguna influencia" de los acontecimientos políticos en la evolución económica. "Por eso vamos a tratar de garantizar la estabilidad política", argumentó el presidente del Gobierno, que anunció su propósito de "favorecer la recuperación" evitando cualquier "signo de debilidad".

González puso también el acento sobre el carácter de la comparecencia de Belloch ante la Comisión de Justicia e Interior del Congreso, prevista hoy a las 10 de la mañana. "No rechazamos la presencia en el Parlamento", dijo, pero "hay muy podo que explicar, obviamente". El Gobierno, según su presidente, quiere dar explicaciones "cuanto antes", si es posible "en este periodo de sesiones" [antes de fin de año], pero "serán parcas".

En cuanto a la actitud de Belloch, al que se ha atribuido resistencia a comparecer en el Congreso sobre el caso GAL, explicó que el ministro de Justicia e Interior "dice algo muy razonable, que no hay datos y que su explicación será parca". González consideró "obvio" que se producirán reacciones de la oposición "declarándose insatisfecha" porque "no hay ningún hecho noticiable de qué informar".

El jefe del Ejecutivo admitió que se ha producido en España un cambio de situación, al acabar con lo que "se consideraba impunidad. en ciertas áreas económicas, porque las instituciones han funcionado", pero se declaró preocupado porque se pueda pasar al extremo de ignorar la "profundidad de un concepto esencial del Estado de derecho, la presunción de inocencia". Como ejemplo puso el caso Palomino, "un montaje que no se corresponde con la realidad" y del que nadie se acuerda.

González reiteró su disposición al diálogo con el presidente del PP y dijo que su último encuentro privado, una cena el lunes de la semana pasada cuando el juez Baltasar Garzón acababa de reabrir el caso GAL- se celebró "en un buen clima". "Volví a ofrecer una actitud de permanente diálogo, que Aznar aceptó". Según el jefe del Gobierno, cuando él era líder del principal partido de la oposición, antes de 1982, siempre respondió afirmativamente a las llamadas telefónicas del entonces presidente del Gobierno. "Era mi obligación", señaló.