Cartas al director

De llorar

Mi esposo y yo somos jubilados y residimos en el paseo marítimo de Villajoyosa (Alicante). Soy enferma crónica del pulmón y necesito reposo por prescripción médica. En la finca lindante se ha instalado, recientemente, una discoteca. Los ruidos que ésta produce hasta altas horas de la mañana son inhumanos y están afectando a mi salud, por imposibilidad de conciliar el sueño. Todos los vecinos somos gente de escasos recursos económicos y hemos puesto de manifiesto y suscrito reiteradas quejas ante el Ayuntamiento. Todo ha sido inútil.No saben cuánta rabia y desesperación nos produce pensar que n...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Mi esposo y yo somos jubilados y residimos en el paseo marítimo de Villajoyosa (Alicante). Soy enferma crónica del pulmón y necesito reposo por prescripción médica. En la finca lindante se ha instalado, recientemente, una discoteca. Los ruidos que ésta produce hasta altas horas de la mañana son inhumanos y están afectando a mi salud, por imposibilidad de conciliar el sueño. Todos los vecinos somos gente de escasos recursos económicos y hemos puesto de manifiesto y suscrito reiteradas quejas ante el Ayuntamiento. Todo ha sido inútil.No saben cuánta rabia y desesperación nos produce pensar que nos obligarán a abandonar nuestra vivienda, por culpa de tanto ruido y tanta molestia, y todo ello consentido por el Ayuntamiento.

¡Y lo más grave es que la apertura de ese negocio ha sido sobre un terreno destinado por el plan de urbanismo a jardín público! No tengo ni idea de leyes, pero sí tengo sentido común, y eso no puede ser. De llorar.-

Haz que tu opinión importe, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Archivado En