Ocho chabolas de un poblado magrebí de Majadahonda arden por una pelea

Dos marroquíes, El Mananni A., de 24 años, y El Abrí Y., de 25, fueron detenidos ayer como presuntos autores del incendio de ocho de las 50 chabolas del poblado Casas de Diego, en la, de hesa de Majadahonda (localidad de 37.000 habitantes). Uno de los acusados declaró a la policía que durante una pelea en el interior de una chabola se cayó una vela y prendió un bidón de gasolina. Sin embargo, según dos testigos, dos marroquíes borrachos provocaron el fuego de forma intencionada. Uno de ellos vertió el bidón de gasolina y el otro le prendió fuego con un mechero, según la Jefatura Su...

Dos marroquíes, El Mananni A., de 24 años, y El Abrí Y., de 25, fueron detenidos ayer como presuntos autores del incendio de ocho de las 50 chabolas del poblado Casas de Diego, en la, de hesa de Majadahonda (localidad de 37.000 habitantes). Uno de los acusados declaró a la policía que durante una pelea en el interior de una chabola se cayó una vela y prendió un bidón de gasolina. Sin embargo, según dos testigos, dos marroquíes borrachos provocaron el fuego de forma intencionada. Uno de ellos vertió el bidón de gasolina y el otro le prendió fuego con un mechero, según la Jefatura Superior de Policía. El incendio ocurrió sobre las 2.30 del viernes y fue extinguido tres horas después, según información los bomberos. El incendio no causó heridos entre los 50 marroquíes que ocupaban las precarias viviendas -una media de seis ocupantes por cada chamizo-.

Saíd Kallalusi, que vivía d esde hace tres años en una de las chabolas consumidas por el fuego, afirmó: "Lo hemos perdido todo, se me han quemado todos mis ahorros, unas 70.000 pesetas, y toda mi documentación. Intenté cogerla por la ventana, pero mi pelo se prendió y tuve que soltar los papeles y salir de ahí". Saíd lamentaba la situación en la que viven los inmigrantes legales e ¡legales en el poblado: "No tenemos luz, y para coger agua tenemos que robarla de una granja que está a un kilómetro de aquí. Además, convivimos unas seis personas por chabola y se pasean ratas como burros de grandes".