La obra 'Humor y muerte' busca el éxito de 'El hilo de Ariadna'

Tras el éxito de la obra El hilo de Ariadna, el director de teatro colombiano Enrique Vargas estrena en la Casa de América Humor y muerte, pieza basada en leyendas colombianas y que, según su autor, pretende que los espectadores no confundan a la muerte con la morida.

Mientras tanto, su grupo de teatro, integrado por 21 actores, continúa las funciones de El hilo de Ariadna, que pone al público en un contacto "directo" con sus emociones. Sin escenario ni butacas, los espectadores entran de uno en uno en un túnel que les conduce hasta los rincones más profu...

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Tras el éxito de la obra El hilo de Ariadna, el director de teatro colombiano Enrique Vargas estrena en la Casa de América Humor y muerte, pieza basada en leyendas colombianas y que, según su autor, pretende que los espectadores no confundan a la muerte con la morida.

Mientras tanto, su grupo de teatro, integrado por 21 actores, continúa las funciones de El hilo de Ariadna, que pone al público en un contacto "directo" con sus emociones. Sin escenario ni butacas, los espectadores entran de uno en uno en un túnel que les conduce hasta los rincones más profundos de su alma. "La obra es un laberinto", definió hace algunas semanas Vargas. La compañía pensaba quedarse cuatro semanas en Madrid, pero la demanda de localidades les ha obligado a estirar su estancia hasta completar los dos meses.

Mientras Vargas relata viejos cuentos colombianos arriba del escenario, sus palabras van cobrando vida. Nelson Jara, integrante del grupo, intenta explicar el fenómeno: "Se llama animación de objetos. Un lazo puede servir para recrear un helicóptero, para escribir o para pasar a otro lado. Creamos ambiente para que el público entre en la historia". Vargas y su compañero Alekos suben por turno al escenario para relatar los cuentos que han recopilado por las distintas regiones de Colombia. Tres músicos les acompañan.

Una de las historias más bonitas es la del conde de Olinos. Muerto por la madre de su enamorada por tener bastante sangre noble en sus venas, la princesa fallece poco después de pena. El conde se convierte en una fuente de agua, y ella, en una planta verde para seguir amándose después de muertos. "Esto es lo que queremos contar: que la muerte es un renacer, no un final", remata Jara.

Humor y muerte. 20.00. Paseo de Recoletos, 2. Días 28 y 29. 700 pesetas.

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