Una auditoría descubre graves irregularidades en Quijorna

En Quijorna (650 habitantes) las cuentas no estaban claras entre los años 1989 y 1992. Durante este período, el pueblo estuvo regido por el alcalde del PP, Jaime Rodríguez. Por eso, su sucesor, Juan José Cerrato, independiente, que accedió al cargo en noviembre de 1992 con una moción de censura apoyada por dos concejales del PP, encargó un auditoría que ahora se encuentra a punto de Finalizar.Los primeros resultados ya están sobre la mesa del regidor: "Existen irregularidades que afectan a la realidad presupuestaria del ejercicio 1992, y anteriores, y que concierne a la capacidad de disponibil...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

En Quijorna (650 habitantes) las cuentas no estaban claras entre los años 1989 y 1992. Durante este período, el pueblo estuvo regido por el alcalde del PP, Jaime Rodríguez. Por eso, su sucesor, Juan José Cerrato, independiente, que accedió al cargo en noviembre de 1992 con una moción de censura apoyada por dos concejales del PP, encargó un auditoría que ahora se encuentra a punto de Finalizar.Los primeros resultados ya están sobre la mesa del regidor: "Existen irregularidades que afectan a la realidad presupuestaria del ejercicio 1992, y anteriores, y que concierne a la capacidad de disponibilidad de los fondos municipales por parte de los órganos de gobierno y modificaciones de los presupuestos".

La auditoría también destaca que, en los presupuestos de esos años, no se refleja la situación de déficit o superávit del municipio, no existe control de recibos pendientes. Hay deudas con Seguridad Social y con el Ministerio de Hacienda.

El actual alcalde, Juan José Cerrato añade: "Estos datos son sólo la punta del iceberg. Seguro que saldrán más cosas en los próximos días". Sin embargo, los primeros resultados del informe técnico llegan tarde para los dos ediles populares. La Comisión Permanente del PP los expulsó el lunes por tránsfugas.

Pedro Núñez Morgades, presidente del comité regional de conflictos y disciplina del PP, justificó ayer la expulsión: "Un edil popular no puede apoyar una moción de censura contra el PP. Hay otros caminos internos para solucionar los conflictos. Los dos concejales expulsados no los utilizaron".

Los tránsfugas, Susana Giral y Fernando Díaz-Guerra, concejales de Urbanismo y Hacienda, retiraron su apoyo a Rodríguez porque "intentó, en tres ocasiones, que diésemos el visto bueno a una factura más que dudosa". Al negarse, el alcalde les destituyó. Ellos se vengaron apoyando la moción de censura.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Sobre la firma

Archivado En