Cartas al director

Objetores en la guerra

No dudo que los objetores que se encuentran en Bosnia a instancias del MPDL (Movimiento para la Paz, el Desarme y la Libertad) están desarrollando una labor útil. Pero lo que me preocupa es a quién está resultando útil. El MPDL tiene dos campos en la ex Yugoslavia: Trebinje, en territorio de los serbios de Karadzic, y Ljubuski, ocupado por los croatas rebeldes a Sarajevo (aunque esto podría cambiar ahora). En estos campos no hay refugiados musulmanes por la sencilla razón de que han sido expulsados, asesinados o encarcelados.¿Qué hacen allí nuestros objetores? Según sus propias declarac...

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No dudo que los objetores que se encuentran en Bosnia a instancias del MPDL (Movimiento para la Paz, el Desarme y la Libertad) están desarrollando una labor útil. Pero lo que me preocupa es a quién está resultando útil. El MPDL tiene dos campos en la ex Yugoslavia: Trebinje, en territorio de los serbios de Karadzic, y Ljubuski, ocupado por los croatas rebeldes a Sarajevo (aunque esto podría cambiar ahora). En estos campos no hay refugiados musulmanes por la sencilla razón de que han sido expulsados, asesinados o encarcelados.¿Qué hacen allí nuestros objetores? Según sus propias declaraciones, cuidan niños y ancianos y realizan funciones de infraestructura. Lo primero no es criticable (aunque haya necesidades mucho mayores en el otro bando); lo segundo es colaborar en la consolidación de territorios separados por la fuerza de Bosnia y limpiados étnicamente.

No censuro a los objetores, pues han ido adonde les han dicho. Tampoco al MPDL, que tiene derecho a apoyar al bando que quiera (aunque quizá debería decirlo antes de pedir ayuda o dinero). La actitud proserbia del MPDL no es ningún secreto e incluso uno de sus principales dirigentes es el defensor más destacado del punto de vista serbio en España, con artículos en prensa y visitas frecuentes a las autoridades de Belgrado.Lo realmente grave es que el Ministerio de Justicia español envió objetores (en cierto modo funcionarios públicos) a trabajar en contra del Gobierno de Sarajevo, el único al que reconoce, vulnerando así además el embargo contra Serbia dictado por Naciones Unidas y al que España se ha comprometido.

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