La Junta de Andalucía propondrá la próxima semana un plan a Gillette para mantener la planta de Sevilla

La Junta de Andalucía tratará de convencer a la multinacional norteamericana Gillette para que reconsidere su decisión de cerrar su factoría de Alcalá de Guadaira (Sevilla). El consejero andaluz de Trabajo, Francisco Oliva, se reunirá la próxima semana con los directivos de la empresa a los que la Junta propondrá un plan de modernización industrial que adapte la actividad productiva de la fábrica sevillana a las de las factorías de Gillette en Isleworth (Reino Unido) y Berlín (Alemania).La producción de la planta sevillana supone un 8% de la producción conjunta de estas tres fábricas europeas....

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La Junta de Andalucía tratará de convencer a la multinacional norteamericana Gillette para que reconsidere su decisión de cerrar su factoría de Alcalá de Guadaira (Sevilla). El consejero andaluz de Trabajo, Francisco Oliva, se reunirá la próxima semana con los directivos de la empresa a los que la Junta propondrá un plan de modernización industrial que adapte la actividad productiva de la fábrica sevillana a las de las factorías de Gillette en Isleworth (Reino Unido) y Berlín (Alemania).La producción de la planta sevillana supone un 8% de la producción conjunta de estas tres fábricas europeas. Según un portavoz de la empresa, la fábrica de Sevilla carece de la tecnología que poseen las fábricas del Reino Unido y Alemania, por lo que su modernización requeriría una fuerte inversión, no aconsejable ante los datos del estancamiento que sufre el mercado y el exceso de producción que la multinacional tiene en Europa.

Por su parte, el viceconsejero de Trabajo, Ramón Marrero, dijo ayer que la Junta de Andalucía se opondrá radicalmente al cierre de la factoría si los directivos de Gillette no modifican su planteamiento inicial e irrevocable de desmantelar la planta española. Marrero calificó de "incomprensible" la decisión de la empresa, que en 1993 obtuvo 700 millones de pesetas de beneficios brutos. El viceconsejero anunció la reunión con los directivos de la multinacional para la próxima semana.

Mientras, los trabajadores de Gillette abandonaron en la mañana de ayer el encierro iniciado en la tarde del viernes. El comité de empresa solicitó ayer entrevistarse con el presidente de la Junta, Manuel Chaves, el consejero de Economía, Jaime Montaner, y con el delegado provincial de Trabajo, Enrique Martínez Lagares, y demandó la intervención de las autoridades políticas andaluzas para buscar una solución al conflicto.

Gillette Española S. A. anunció el viernes a los 246 trabajadores de su fábrica en Alcalá de Guadaira, que debido al plan mundial de realineación de la empresa por el exceso de producción existente en Europa, había decidido cerrar la planta sevillana de forma "irrevocable" y trasladar su actividad a sus otras dos factorías europeas en Islewortg y Berlín.

La empresa pretende negociar con los trabajadores despidos incentivados de forma individual. Por su parte, la plantilla sevillana ha acordado impedir estos contactos y exigir el mantenimiento de la actividad y de los puestos de trabajo. Por el momento, la plantilla ha decidido no iniciar ningún tipo de negociación y esperar esa reunión.

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