Amenazados con un desahucio los inquilinos de una casa con aluminosis

Constructora de Viviendas, la empresa propietaria del bloque de viviendas ubicado entre el paseo de la Castellana y las calles Félix Boix, Doctor Fleming y Carlos Maurrás, requirió ayer oficialmente a sus inquilinos para que permitan realizar en sus casas los trabajos de inspección para un nuevo informe técnico con el que corroborar si el inmueble padece aluminosis, la enfermedad del cemento. La propiedad avisa en la misma notificación que, en caso contrario, solicitarán en los juzgados, en un plazo de cinco días, la oportuna autorización para entrar en los pisos y desalojar a los vecinos.Los ...

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Constructora de Viviendas, la empresa propietaria del bloque de viviendas ubicado entre el paseo de la Castellana y las calles Félix Boix, Doctor Fleming y Carlos Maurrás, requirió ayer oficialmente a sus inquilinos para que permitan realizar en sus casas los trabajos de inspección para un nuevo informe técnico con el que corroborar si el inmueble padece aluminosis, la enfermedad del cemento. La propiedad avisa en la misma notificación que, en caso contrario, solicitarán en los juzgados, en un plazo de cinco días, la oportuna autorización para entrar en los pisos y desalojar a los vecinos.Los propietarios de la primera manzana en la que se ha comprobado oficialmente aluminosis en Madrid quieren rehabilitar el inmueble -muchas viviendas están sin alquilar- y para ello necesitan desalojar durante seis meses a los actuales inquilinos del inmueble.

Constructora de Viviendas, que ya encargó un primer estudio sobre el estado de la manzana a la consultora OTEP Internacional, el primero que constató la presencia de la aluminosis, quiere contratar otro estudio, ahora a la Oficina Técnica de Diagnosis (OTD), del Colegio de Aparejadores y Arquitectos Técnicos de Barcelona.

El objetivo anunciado es evaluar la seguridad de las estructuras de la casa e intentar llevar a cabo las reparaciones necesarias sin desalojar el edificio.La empresa propietaria del inmueble ha intentado negociar, en el último año en varias ocasiones con los inquilinos una solución a este conflicto. No ha surgido ningún resultado: "Hasta la fecha, no sólo no se ha encontrado la más mínima colaboración entre los usuarios de las viviendas sino que, por el contrario, se vienen produciendo sistemáticas ofensas sobre la forma de actuar de la propiedad".

Desbloquear el conflicto

La propiedad se plantea el trabajo técnico de OTD como una nueva alternativa para desbloquear el conflicto por una vía pacífica, pero se reserva otras vías. Construcciones y Viviendas envió ayer a sus inquilinos del primer bloque de pisos, los situados en el número 208 del paseo de la Castellana, un impreso para que admitan por escrito su disponibilidad a que se efectúen las inspecciones en sus casas, "que en ningún caso se iniciarán hasta después de las fiestas de Navidad".Si los inquilinos se niegan o no firman este impreso, la propiedad entenderá que rechazan la colaboración y pedirá la autorización judicial para entrar en los pisos.

OTD, en cualquier caso y ya antes de entrar en las casas, ha concluido un primer diagnóstico: "Hay viguetas de cemento aluminoso, existen síntomas de lesiones en forjados, existen razonables sospechas de disfunciones en la estructura vertical y, las jácenas". También se admite que "no se han apreciado suficientes lesiones para considerar la ruina técnica de los edificios".

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