Los Doce afinan las propuestas de la Comisión para crear 15 millones de empleos hasta el 2000

Los Doce encaran el tramo final de sus reflexiones sobre la gran batalla contra el de sempleo. Los ministros de Economía y Finanzas de la Unión Europea se reúnen hoy y el próximo 6 de diciembre para preparar la cumbre del 10 y 11 de diciembre, convertida en la gran cita de Europa con la crisis. Aunque Jacques Delors reserva para la cumbre sus propuestas más políticas, los ministros tendrán ocasión de estudiar las sugerencias de la Comisión sobre el crecimiento y el empleo, con la vista puesta en el objetivo de crear 15 millones de nuevos empleos hasta el año 2000.

Papales no faltarán so...

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Los Doce encaran el tramo final de sus reflexiones sobre la gran batalla contra el de sempleo. Los ministros de Economía y Finanzas de la Unión Europea se reúnen hoy y el próximo 6 de diciembre para preparar la cumbre del 10 y 11 de diciembre, convertida en la gran cita de Europa con la crisis. Aunque Jacques Delors reserva para la cumbre sus propuestas más políticas, los ministros tendrán ocasión de estudiar las sugerencias de la Comisión sobre el crecimiento y el empleo, con la vista puesta en el objetivo de crear 15 millones de nuevos empleos hasta el año 2000.

Papales no faltarán sobre la mesa de los ministros, y el estudio de algunos probablemente se aplace hasta el Ecofin de diciembre. Junto al documento Delors sobre "Crecimiento, competitividad y empleo", la Comisión ha ido cerrando en las dos últimas semanas el texto "Restauración del crecimiento y el empleo. Reforzamiento de la convergencia", elaborado por el equipo del comisario de Economía y Finanzas, Henning Christophersen, y un informe que analiza sombriamente los escasos progresos de los programas de convergencia de los Doce.Las propuestas elaboradas por la Comisión parten de la base de que hay que crear 15 millones de puestos de trabajo antes del año 2.000 para reducir la tasa media de paro en la Unión Europea al 5% o al 6% con el nuevo siglo. Los pronósticos comunitarios son hoy más bien sombríos: el paro puede alcanzar el 11 % y el 12% en 1994-95 y aún seguirá por encima del 10% en 1996-97. La economía europea caerá este año un 0,4% y apenas aumentará un 1,3% en 1994 y un 2,1% en 1995, para alcanzar ya una tasa más aceptable en 1996: entre el 3% y el 3,5%.

La Comisión no ofrece fórmulas mágicas al Ecofin: reducción de tipos de interés, reforma del mercado del trabajo, aumentos de salarios por debajo de los aumentos de productividad, recapitalización de las empresas para incentivar la inversión privada, grandes esfuerzos en formación, mayor desarrollo de sectores económicos con futuro (sanidad, turismo, arte), cultura, medio ambiente), etcétera.

El Ecofin estudiará también los niveles de convergencia de las economías de Francia y Alemania, a la luz de la concertación mutua de planes acordada por ambos países.

La crisis del mecanismo de cambios del Sistema Monetario Europeo (SME) y las medidas de choque acordadas por algunos países para combatir el paro han abierto una brecha en la convergencia de los Doce, tomada más bien en divergencia. La Comisión estima, sin embargo, que se están reduciendo las distancias en inflación, con seis países bajo niveles aceptables, entre el 3% y el 4%: Bélgica, Dinamarca, Francia, Irlanda, Luxemburgo y Holanda. También en tipos de interés se observa una mayor convergencia.

Sin embargo, las tasas de déficit público se han disparado, con deterioros muy pronunciados en Dinamarca, Alemania, Francia y el Reino Unido. Los niveles de deuda pública también han crecido por encima del 60% fijado en Maastricht.

El quinto factor de convergencia, la estabilidad cambiaria, es probablemente la que ha sufrido el revolcón más espectacular: la libra esterlina y la lira italiana fuera del SME y las bandas de fluctuación se han roto para situar las monedas en una flotación real con un límite del 15%. La tormenta monetaria no sólo ha afectado a la estabilidad cambiaria sino que ha supuesto un factor negativo para la expansión del mercado único.

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