División entre los delegados palestinos en una fase crítica del diálogo con Israel

Un tabú de los sucesivos Gobiernos israelíes, el diálogo con la OLP, podría romperse como consecuencia indirecta de una crisis interna en la delegación palestina en las conversacione,, de paz, que pasan por un momento clave. Tres de sus más destacados integrantes -Faisal al Huseini, Hanan Ashraui y Saeb Erekat- viajaron ayer a Túnez con la carta de dimisión en el bolsillo.En el país magrebí pensaban presentar al líder de la OLP, Yasir Arafat, un repertorio de quejas, entre las que destacan el rechazo de la nueva línea negociadora, que consideran claudicante y que no respaldan los habitantes de...

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Un tabú de los sucesivos Gobiernos israelíes, el diálogo con la OLP, podría romperse como consecuencia indirecta de una crisis interna en la delegación palestina en las conversacione,, de paz, que pasan por un momento clave. Tres de sus más destacados integrantes -Faisal al Huseini, Hanan Ashraui y Saeb Erekat- viajaron ayer a Túnez con la carta de dimisión en el bolsillo.En el país magrebí pensaban presentar al líder de la OLP, Yasir Arafat, un repertorio de quejas, entre las que destacan el rechazo de la nueva línea negociadora, que consideran claudicante y que no respaldan los habitantes de los territorios ocupados, progresivamente radicalizados.

La crisis estalló hace unos días, cuando Arafat quiso obligarles a entregar al secretario de Estado norteamericano, Warren Christopher, un documento que estimaron demasiado blando. Tras una amenaza de destitución, el líder de la OLP aceptó endurecer ligeramente el texto, pero el conflicto ya era imparable. En privado, varios delegados palestinos han expresado sus reticencias ante las órdenes contradictorias que reciben de Arafat.

El líder de la OLP se ve obligado a contemporizar con el presidente sirio, Hafez el Asad, quien se niega a aceptar que la organización palestina pueda adoptar decisiones con total independencia.

Varios ministros israelíes presionan estos días al jefe de Gobierno, el laborista Isaac Rabin, para que negocie directamente con la OLP, que les parece un interlocutor más "razonable" y flexible que los delegados oficiales en el diálogo de paz. El argumento que utilizan es que en otro caso se crearía un vacío de poder en las filas palestinas que llenarían los radicales. Página 3

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