Una quinta parte de las playas de la CE no es apta para el baño, según datos de 1992

Una quinta parte de las playas y zonas de baño de los países de la Comunidad Europea, el 19%, no cumple con las normas sobre contaminación de aguas fijadas por la propia CE, según el, décimo informe elaborado por los servicios de la Comisión, a partir de los datos relativos a 1992 y suministrados por las administraciones nacionales. Desde 1982, primer año en que se efectuó un informe de este tipo, ha disminuido en un 30% el número de zonas de baño críticas, mientras que los sistemas de evaluación se han perfeccionado y han aumentado los puntos controlados, desde unos 7.000 hace diez años a uno...

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Una quinta parte de las playas y zonas de baño de los países de la Comunidad Europea, el 19%, no cumple con las normas sobre contaminación de aguas fijadas por la propia CE, según el, décimo informe elaborado por los servicios de la Comisión, a partir de los datos relativos a 1992 y suministrados por las administraciones nacionales. Desde 1982, primer año en que se efectuó un informe de este tipo, ha disminuido en un 30% el número de zonas de baño críticas, mientras que los sistemas de evaluación se han perfeccionado y han aumentado los puntos controlados, desde unos 7.000 hace diez años a unos 16.000 actualmente, incluyendo los 3.000 que se han sumado con las adhesiones de España, Grecia y Portugal.

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Las inspecciones realizadas en estos diez años de control de la contaminación de las playas se han elevado a 40 millones, con ocho millones de muestras tomadas que han dado lugar a 20 millones de análisis microbiológicos, según las cifras publicadas ayer por la Comisión Europea en un detallado folleto que se acompaña con los mapas de las playas de los Doce. La evaluación global permite considerar que "la calidad de las aguas costeras es con frecuencia buena, incluso excelente", mientras que "las aguas interiores ponen en evidencia numerosas situaciones críticas".La proporción de puntos críticos es de uno sobre diez en las playas marítimas y de uno sobre tres en las zonas interiores. Según la Comisión, la ausencia de calidad se debe con frecuencia a la utilización masiva de dichas zonas en momentos de mucho calor y de escasa renovación de las aguas.

Estas observaciones son perfectamente trasladables al caso español, en el que el informe señala "una ligera mejora" en las aguas costeras y "un deterioro de las aguas interiores". Los puntos controlados en Espana, tal como publicó EL PAÍS el 16 de abril, son 1.636, de los que el 8 1 % se halla en las costas. El 74% de las playas presentaba valores correctos.

España ocupa el cuarto lugar en el ranking en cuanto a buena situación sanitaria de sus playas, por detrás de Grecia, Dinamarca e Irlanda, si bien., de los cuatro países, ha sido quien más puntos de análisis ha efectuado -1.335 frente a los 90 de Grecia, por ejemplo-.

Evaluación no comparativa

El comisario de Medio Ambiente, Yannis Paleokrassas, expresó ayer su satisfacción por la mejora registrada de año en año en los balances sobre la situación sanitaria de las playas europeas y aseguró que se trataba de un ejemplo de cómo la creación de empleo, en este caso mediante el turismo, y el medio ambiente van a la par.

El balance asegura también que los servicios de la Comisión quieren empezar a aproximar los sistemas de evaluación utilizados hasta ahora por los distintos países, uno de los principales fallos en la actualidad.

La primera fase de la convergencia prevé la realización de una comparación de métodos de análisis en microbiología marina. Mientras tanto, la Comisión acepta que los actuales estudios cuentan con un cierto grado de imprecisión y con dificultades para comparar y evaluar los métodos utilizados en cada país socio.

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