La regulación en Seat afecta a 7.090 empleos, y en Fiat, a 33.000
La empresa automovilística Seat-Volkswagen presentó el martes el expediente de regulación de empleo que afectara de forma rotativa a gran parte de la plantilla de su factoría de la Zona Franca de Barcelona en los próximos tres años, según fuentes del Departamento de Trabajo de la Generalitat citadas por Europa Press. El expediente prevé que se vean afectados un máximo de 7.090 trabajadores, frente a unas previsiones iniciales de 6.315 empleados.El expediente, si finalmente es aprobado, afectará anualmente a más de 2.300 trabajadores, que deberán permanecer en el paro durante 12 meses antes de ...
Regístrate gratis para seguir leyendo
Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
La empresa automovilística Seat-Volkswagen presentó el martes el expediente de regulación de empleo que afectara de forma rotativa a gran parte de la plantilla de su factoría de la Zona Franca de Barcelona en los próximos tres años, según fuentes del Departamento de Trabajo de la Generalitat citadas por Europa Press. El expediente prevé que se vean afectados un máximo de 7.090 trabajadores, frente a unas previsiones iniciales de 6.315 empleados.El expediente, si finalmente es aprobado, afectará anualmente a más de 2.300 trabajadores, que deberán permanecer en el paro durante 12 meses antes de reincorporarse a la empresa.
En la argumentación del expediente, Seat alega la fuerte caída en el mercado automovilístico, el cese en la producción del Ibiza en la planta de la Zona Franca, el retraso en las inversiones de Volkswagen y en la introducción de nuevos modelos.
Por su parte, el grupo automovilístico italiano Fiat comunicó ayer a los sindicatos la apertura de nuevos expedientes de regulación de empleo que afectarán a un máximo de 33.000 trabajadores el próximo mes de mayo, según informa Efe. La regulación se aplicará del 10 al 30 de mayo, distribuida en tres semanas. En la primera semana los trabajadores afectados serán 33.000, en la segunda semana serán 7.000 y en la tercera semana 33.000 empleados. El objetivo de la regulación es reducir la producción en 35.000 unidades.