Los Doce esperan que la ratificación de Maastricht frene el crecimiento del paro

El desempleo alcanzará los 17 millones de personas en la CE si no cambia la baja tonalidad de las economías europeas. Esta es la síntesis del primer debate público realizado por el Consejo de Ministros de Trabajo de la CE sobre el empleo en la Comunidad. Buena parte de los representantes de los Doce situaron en primer plano la resolución de los grandes problemas políticos que tiene Europa ante sí, como alternativa a la destrucción de puestos de trabajo, y el primero de ellos la ratificación del Tratado de Maastricht, todavía pendiente del voto del Parlamento británico y del referéndum danés....

El desempleo alcanzará los 17 millones de personas en la CE si no cambia la baja tonalidad de las economías europeas. Esta es la síntesis del primer debate público realizado por el Consejo de Ministros de Trabajo de la CE sobre el empleo en la Comunidad. Buena parte de los representantes de los Doce situaron en primer plano la resolución de los grandes problemas políticos que tiene Europa ante sí, como alternativa a la destrucción de puestos de trabajo, y el primero de ellos la ratificación del Tratado de Maastricht, todavía pendiente del voto del Parlamento británico y del referéndum danés.

La ratificación de Maastricht, la consolidación del Mercado único, el retorno a la estabilidad monetaria, la conclusión de la Ronda Uruguay del GATT y la aplicación de la Iniciativa de Crecimiento Europea son los elementos que deberán actuar como señal de relanzamiento de la confianza a los agentes económicos. Las políticas de empleo, en cambio, sólo servirán para el medio plazo, pues no ofrecen respuestas inmediatas ante esta crisis.El Consejo de Ministros de Trabajo debatió sobre el paro a puertas abiertas y con la televisión en directo por primera vez en la historia de la CE. A pesar del interés que tiene el tema para los ciudadanos, las intervenciones no aportaron ni un solo dato o idea nueva y no consiguieron despertar ni una pizca de interés de una escasa audiencia formada por un puñado de periodistas bostezantes.

Libro verde

El comisario de Asuntos Sociales, Padraig Flynn, anunció la celebración de una Semana del Empleo en octubre próximo y la elaboración de un Libro Verde sobre el paro que será presentado al Parlamento en otoño. El próximo Consejo Europeo, que se celebrará en junio en Copenhague, situará el problema en el primer punto del orden del día. No en vano el paro supera ampliamente los 16 millones de personas, lo que supone el 11 % de la población activa.

La ministra de Trabajo de Dinamarca y presidenta de turno del Consejo, Jytte Andersen, señaló en sus conclusiones que las ayudas públicas y comunitarias deben dirigirse fundamentalmente al paro de larga duración, y a los desempleados mayores de 50 años y a los que no tienen cualificación profesional.

Todas las intervenciones aportaron ideas en tomo a la redistribución del empleo y al papel de formación continua. Casi todos los ministros aludieron a la necesidad de flexibilizar el mercado de trabajo europeo y de seguir una política de moderación salarial."Las vacas flacas, engordan"

"Rechazo la visión derrotista", aseguró el ministro español, Luis Martínez Noval, al término del debate de ayer. "Acabo de escuchar que estamos en la situación de desempleo que teníamos en el año 1985. Entonces, tengo todas las razones para esperar que llegue un crecimiento como el que empezó en aquel momento". "Después del valle viene el pico y las vacas flacas terminan por engordar. Por eso hemos preparado las medidas de reforma del mercado de trabajo, para que la nueva etapa de crecimiento permita aprovecharlo para el empleo", concluyó el ministro de Trabajo.

Luis Martínez Noval aseguré, sin embargo, que en algunos países donde se está produciendo la recuperación, como es el caso de Estados Unidos, se percibe una escasa traducción en creación de puestos de trabajo. Los empleos que se han perdido, aseguró el ministro de Trabajo, ya no se recuperan.

Además, apunto el titular de Trabajo español, el desempleo afecta de forma muy importante al sector de los servicios, cosa que no ocurrió en las anteriores crisis. La consecuencia es que el paro se extiende también entre los empleados de cuello blanco y entre los cuadros.