Puerto Príncipe, Haití..

Ante la tragedia que embarga al pueblo haitiano, nuevamente víctima del subdesarrollo y la miseria secular que obliga a humildes ciudadanos a cruzar el peligroso trayecto del canal de los Vientos tratando de ganar el territorio norteamericano, sentimos el más profundo desgarramiento frente a la muerte de más de mil compatriotas ahogados en las peligrosas aguas del mar Caribe. En mi calidad de becario del Instituto de Cooperación Iberoamericana, hago un llamamiento a la comunidad española para que extienda su consecuente solidaridad con los familiares de los fallecidos, y así calmar las condici...

Ante la tragedia que embarga al pueblo haitiano, nuevamente víctima del subdesarrollo y la miseria secular que obliga a humildes ciudadanos a cruzar el peligroso trayecto del canal de los Vientos tratando de ganar el territorio norteamericano, sentimos el más profundo desgarramiento frente a la muerte de más de mil compatriotas ahogados en las peligrosas aguas del mar Caribe. En mi calidad de becario del Instituto de Cooperación Iberoamericana, hago un llamamiento a la comunidad española para que extienda su consecuente solidaridad con los familiares de los fallecidos, y así calmar las condiciones infrahumanas que les motivaron a desafiar la peligrosa aventura.Haití, reprimido e ignorado, ha sufrido la desaparición del padre del periodismo nacional, Lucien Montas, director del diario Le Nouvelliste -el decano de la prensa haitiana, fundado en 1898-, y, desgraciadamente, la prensa no ha dicho nada. Mi pésame a la familia Montas de Puerto Príncipe.

Solicito respetuosamente solidaridad con el pueblo haitiano.-