ECOLOGÍA

Localizado el fallo que ha paralizado una semana la central de Ascó

Los técnicos de la central nuclear de Ascó, en Tarragona, detectaron ayer el origen de la anomalía que llevó a paralizar el viernes pasado el reactor número uno. Se trata de dos poros que han afectado a dos tubos de un generador de vapor. Estos dos poros provocaron una fuga de agua radiactiva del circuito primario al secundario de ocho litros por hora. Las tareas de reparación comenzaron ayer y el subdirector de la empresa explotadora, Ángel Ayala, espera que el próximo viernes vuelva a conectarse este grupo a la red.Los dos tubos afectados serán taponados y puestos fuera de servicio. Se s...

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Los técnicos de la central nuclear de Ascó, en Tarragona, detectaron ayer el origen de la anomalía que llevó a paralizar el viernes pasado el reactor número uno. Se trata de dos poros que han afectado a dos tubos de un generador de vapor. Estos dos poros provocaron una fuga de agua radiactiva del circuito primario al secundario de ocho litros por hora. Las tareas de reparación comenzaron ayer y el subdirector de la empresa explotadora, Ángel Ayala, espera que el próximo viernes vuelva a conectarse este grupo a la red.Los dos tubos afectados serán taponados y puestos fuera de servicio. Se sumarán así a los 503 taponados con anterioridad en el mismo generador de vapor desde que la central se puso en funcionamiento en 1983, que representan casi el 11% del totál. Los dos poros son consecuencia de la corrosión que afecta de formabastante extendida a estos finos tubos de un milímetro, a través de cuyas paredes se produce la transferencia de calor entre el agua, que recoge la energía del reactor nuclear -circuito primario- y la que debe convertirse en vapor para mover los turbogeneradores de electricidad -circuito secundario-. Estas finas paredes de los tubos de los generadores son en la actualidad el gran punto débil del área nuclear de las centrales en todo el mundo.

Los problemas de corrosión, detectados hace ya años, han llevado a la empresa a planificar la sustitución de los tres generadores de vapor del grupo uno dentro de dos años y los del grupo dos en 1996. Esta operación le supondrá la mayor inversión hecha desde que se puso la central en funcionamiento: entre 30.000 y 40.000 millones de pesetas. El caso de Ascó no es único: Almaraz debe hacer lo mismo.

Con más de 22 millones de kilovatios hora de producción diaria, el reactor paralizado genera anualmente en torno al 5% de la electricidad que se produce en España. El grupo dos, también parado desde el sábado a causa de las operaciones anuales de revisión y recarga de combustible, genera otro 5% del total.

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