Mueren en Francia 18 niños tratados con hormonas extraídas de un cadáver

Dieciocho niños que padecían enanismo hipofisario (falta de producción de la hormona del crecimiento), y que habían sido tratados en los años ochenta con una hormona de crecimiento extraída de la hipófisis de un cadáver, han fallecido como consecuencia de la enfermedad de Creutzfeldt-Jakob (afección degenerativa asociada a la corteza cerebral y los ganglios basales que produce demencia y en pocos meses la muerte), según indicó el jueves en París el ministro francés de Sanidad y de Acción Humanitaria, Bernard Kouchner.Este nuevo caso que concierne a la Sanidad pública francesa salta a la lu...

Dieciocho niños que padecían enanismo hipofisario (falta de producción de la hormona del crecimiento), y que habían sido tratados en los años ochenta con una hormona de crecimiento extraída de la hipófisis de un cadáver, han fallecido como consecuencia de la enfermedad de Creutzfeldt-Jakob (afección degenerativa asociada a la corteza cerebral y los ganglios basales que produce demencia y en pocos meses la muerte), según indicó el jueves en París el ministro francés de Sanidad y de Acción Humanitaria, Bernard Kouchner.Este nuevo caso que concierne a la Sanidad pública francesa salta a la luz cuando aún se encuentra en fase de esclarecimiento el problema de la sangre contaminada con el virus del sida y que se exportó a varios países. En el caso de la hormona del crecimiento fueron tratados con ella al menos 2.305 niños antes de que el suministro fuera reemplazado por otro tipo de hormonas elaboradas por ingeniería genética.

El ministro de Sanidad francés, que ha presentado un informe sobre el tema elaborado por la Inspección General de Asuntos Sociales, indicó que la hormona del crecimiento se utilizó durante los años ochenta "en condiciones que, vistas ahora desde la perspectiva de 1992, no se deberían haber realizado". ""Pero hay que tener en cuenta el estado de los conocimientos en el momento que se utilizó esta hormona", dijo el ministro.

En el informe se señala que este caso ha puesto en evidencia "graves disfunciones" en el funcionamiento de determinados dispositivos de la Sanidad pública y revela que la información que se facilitó a los padres de los niños "fue tardía e insuficiente".

El propio ministro ha reconocido que el Gobierno francés reaccionó tarde frente al riesgo que suponía la administración de la hormona, mientras que en otros países, como es el caso de Estados Unidos, se dejó de suministrar mucho antes.

La enfermedad de Creutzfeldt-Jakob no se puede diagnosticar de forma preventiva. Puede vivir en estado latente durante mucho tiempo.