Preocupación

Deseo manifestar mi preocupación por las recientes declaraciones de José María Setién, obispo de San Sebastián, en las que comparaba en gravedad los crímenes de ETA con las prácticas abortivas.Es perfectamente comprensible que haya una sensibilidad cristiana que rechace la legalización del aborto, y que el obispo Setién se sienta obligado a expresar ese rechazo como represen-

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tante de la Iglesia y de esa sensibilidad, pero también es posible sugerir que hay otras ocasiones para ello y otras maneras de hac...

Deseo manifestar mi preocupación por las recientes declaraciones de José María Setién, obispo de San Sebastián, en las que comparaba en gravedad los crímenes de ETA con las prácticas abortivas.Es perfectamente comprensible que haya una sensibilidad cristiana que rechace la legalización del aborto, y que el obispo Setién se sienta obligado a expresar ese rechazo como represen-

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tante de la Iglesia y de esa sensibilidad, pero también es posible sugerir que hay otras ocasiones para ello y otras maneras de hacerlo que no sean la de esa comparación disparatada e inoportuna que, contradictoria y desgraciadamente, favorece más la continuidad y la impunidad de los asesinatos que el derecho a la vida.

En este sentido, considero necesario denunciar cuantas declaraciones provenientes de personas o instancias públicas vayan dirigidas a relativizar o restar gravedad a los crímenes de ETA. Y en ese contexto se pueden incluir las palabras del obispo Setién.

Precisamente por el respeto que merecen los ciudadanos que se oponen a la legalización del aborto, independientemente de que comparta o no sus ideas, pienso que su opción no debe ser instrumentalizada políticamente por nadie y menos para legitimar la violencia, descalificando moralmente a quienes la condenan- Miembro de la Plataforma Cívica por la Paz.