Un triste recuerdo
La República checoslovaca se constituyó como Estado común de los checos y los eslovacos el 28 de octubre de 1918, tras la desintegración del imperio austro-húngaro a raíz de los resultados de la I Guerra Mundial. Sobre la base de los acuerdos de paz de Trianón, Firmados el 4 de junio de 1920, se determinaron las fronteras del nuevo Estado checoslovaco formado, además de por los países checos, también por Eslovaquia, perteneciente hasta ese momento a Hungría, país perdedor de la I Guerra Mundial.Mientras que la nación checa saludó a la constitución de la nueva Checoslovaquia como retorno a su i...
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La República checoslovaca se constituyó como Estado común de los checos y los eslovacos el 28 de octubre de 1918, tras la desintegración del imperio austro-húngaro a raíz de los resultados de la I Guerra Mundial. Sobre la base de los acuerdos de paz de Trianón, Firmados el 4 de junio de 1920, se determinaron las fronteras del nuevo Estado checoslovaco formado, además de por los países checos, también por Eslovaquia, perteneciente hasta ese momento a Hungría, país perdedor de la I Guerra Mundial.Mientras que la nación checa saludó a la constitución de la nueva Checoslovaquia como retorno a su independencia, -perdida en 1526 después de que los habsburgos se apoderasen de la corona checa-, los eslovacos no pudieron hacer lo mismo. Eslovaquia vivió largos siglos bajo una fuerte opresión de Hungría y jamás en su historia había logrado tener su propio Estado.
La primera República checoslovaca, como se denomina al Estado que existió desde 1918 hasta 1939, brindó un amplio espacio a los hermanos eslovacos para que se emancipasen cultural y socialmente y que, por su propia voluntad, se adhirieron a Checoslovaquia a través de la declaración de Martín.
En marzo de 1939, los eslovacos proclamaron su Estado independiente, aliado de Alemania de Hitler. De esta manera Eslovaquia logró formar su primer y hasta ahora último Estado independiente, entre cuyos méritos figuró el envío a los campos de concentración alemanes a más de 80.000 judíos.
El Estado independiente Eslovaco desapareció en 1945, al final de la II Guerra Mundial, y por largo tiempo, a nadie se le ocurrió recordar este capítulo bastante nefasto de la historia eslovaca.
Fue en 1990 cuando en Eslovaquia comenzaron a festejar el aniversario de la muerte del presidente del único Estado independiente eslovaco, Jozes Tiso, que fue declarado por las potencias ganadoras de la II Guerra Mundial, criminal de guerra y ejecutado.