GOLPE A LA UNIÓN EUROPEA

La CE, dispuesta a dar tiempo a Dinamarca

Los ministros de Exteriores de la Comunidad Europea (CE) celebran hoy una reunión extraordinaria en Oslo para intentar buscar soluciones a la grave crisis provocada por el rechazo danés al Tratado de Unión Europea aprobado en la cumbre de Maastricht. Los Doce parecen dispuestos a dar un cierto tiempo a Dinamarca para intentar su reenganche en el proceso de construcción europea, aunque el Reino Unido e Irlanda no quisieron pronunciarse al respecto. "Si esto [el reenganche] no fuera posible, existen vías políticas y jurídicas para continuar adelante a Once", manifestaron ayer fuentes diplomática...

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Los ministros de Exteriores de la Comunidad Europea (CE) celebran hoy una reunión extraordinaria en Oslo para intentar buscar soluciones a la grave crisis provocada por el rechazo danés al Tratado de Unión Europea aprobado en la cumbre de Maastricht. Los Doce parecen dispuestos a dar un cierto tiempo a Dinamarca para intentar su reenganche en el proceso de construcción europea, aunque el Reino Unido e Irlanda no quisieron pronunciarse al respecto. "Si esto [el reenganche] no fuera posible, existen vías políticas y jurídicas para continuar adelante a Once", manifestaron ayer fuentes diplomáticas.

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El presidente de la Comisión Europea, Jacques Delors, se limitó a leer un comunicado del colegio de comisarlos en el que se afirma que el Tratado de Maastricht sigue siendo "un salto cualitativo indispensable para que la CE pueda afrontar el desafío internacional y asumir sus responsabilidades".Delors advirtió también de las consecuencias del referéndum "no sólo para la propia Comunidad, sino para Dinamarca y los daneses, y también para las perspectivas de ampliación" que se tenían en mente.

El objetivo de la reunión extraordinaria es "examinar qué significado tiene el no del pueblo danés", manifestó Joâo de Deus Pinheiro, ministro portugués de Exteriores y presidente de turno de la CE. La cita en Oslo (los Doce sólo se han reunido fuera del territorio comunitario en Nueva York con ocasión de la Asamblea General de la ONU) obedece a que allí se celebra el Consejo Atlántico de la OTAN y esta convocatoria urgente sólo obliga a desplazarse al representante de Irlanda.

El protagonismo de la reunión corresponderá a Dinamarca. Será el ministro danés Uffe Ellemann-Jensen el que tendrá que explicar las posibles soluciones internas para dar una salida a la crisis. Sin embargo, según subrayó Pinheiro, "no hay lugar para renegociar el tratado", aspiración que pueden plantear los daneses.

Al mismo tiempo, la presidencia portuguesa de la CE ha ¡niciado contactos con vistas a convocar, acaso el próximo fin de semana, una cumbre extraordinaria en la que 11 Estados comunitarios confirmarían su voluntad de seguir adelante con la construcción europea, según indicó el ministro luxemburgués de Asuntos Exteriores Jacques Poos, informa Ignacio Cembrero desde Oslo.

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Un Consejo Europeo a tan corto plazo no permitiría buscar fórmulas jurídicas para superar el escollo danés pero, según el ministro, tendría el mérito de enviar a la opinión pública y a los Gobiernos no comunitarios "una clara señal política" de la voluntad de la abrumadora mayoría de la Comunidad Europea de profundizar su proceso de integración monetaria y política.

Denunciar el tratado

El Reino Unido, que asumirá la presidencia comunitaria el próximo 1 de julio, aunque parece dispuesto a sumarse a la mayoría se mantiene a la expectactiva. "Lo primero", resumió un diplomático, "es dar tiempo a los daneses porque en la Comunidad no se mata a nadie y crisis las sufren todos los países". Después, si no fuera posible incorporar a Dinamarca -los mecanismos son convocar nuevas elecciones u otro referéndum en el que triunfara el sí-, la solución pasaría por denunciar el actual Tratado de Maastricht. Se trataría de firmar el mismo texto a Once.

En ese caso habría dos comunidades: una a Doce que comprendería el Tratado de Roma y el Acta única, y otra a Once a la que se le añadiría la unión política y monetaria acordada en Maastricht. El funcionamiento futuro podría basarse en convocar prácticamente sólo reuniones de la Comunidad a Once, con lo cual Dinamarca quedaría marginada.

Esta solución es la más factible, aunque todo dependerá del papel que decida jugar el eje París-Bonn. François Mitterrand y Helmut Kohl parecen dispuestos a llevar Maastricht adelante y esa decisión la apoyan inicialmente España, Italia, Bélgica, Holanda, Luxemburgo, Portugal y Grecia.

Irlanda por los beneficios que obtiene de la cohesión no puede renunciar a Europa y el Reino Unido es la única duda. Si Dinamarca no se integra totalmente, la CE se verá obligada a reflexionar en la posibilidad de introducir mecanismos de expulsión de un país que bloquee al resto. Hasta ahora la salida de un socio sólo es posible de manera unilateral y voluntaria.

Las otras opciones para la refundación de la CE son más problemáticas. Un informe de los servicios jurídicos comunitarios plantea fa posibilidad de denunciar el Tratado de Roma y el Acta única para volver a firmarlos junto al Tratado de Unión Europea por los países que quieran asumir todo el proceso.

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