Abono en Las Ventas

El motivo por el cual me pongo en contacto con usted está relacionado con el abono de la plaza de toros de Las Ventas, de mi propiedad, en la categoría de estudiante.El 28 de mayo pasado me fueron sustraídos algunos efectos personales, entre los que se encontraba mi tarjeta de abonado de estudiante de Las Ventas. Después de presentar la correspondiente denuncia ante la comisaría del distrito Universidad, acudo a las oficinas de la plaza de toros con el fin de solventar el problema, me atiende una persona a la puerta de las oficinas que, después de escuchar mis explicaciones, mientras hablaba c...

El motivo por el cual me pongo en contacto con usted está relacionado con el abono de la plaza de toros de Las Ventas, de mi propiedad, en la categoría de estudiante.El 28 de mayo pasado me fueron sustraídos algunos efectos personales, entre los que se encontraba mi tarjeta de abonado de estudiante de Las Ventas. Después de presentar la correspondiente denuncia ante la comisaría del distrito Universidad, acudo a las oficinas de la plaza de toros con el fin de solventar el problema, me atiende una persona a la puerta de las oficinas que, después de escuchar mis explicaciones, mientras hablaba con otras cuatro personas a la vez, me contesta: "Je, je... estudiante, yo soy analfabeto, porque el que se murió no nos dejaba estudiar, pero a mí no se me pierde nada, ni me roban, así que, fuera".

Después de una discusión, y tras una hora de espera, es atendido mi deseo de ser recibido por alguien que me dé una explicación para solucionar el problema. Soy recibido por alguien, que en ningún momento me quiere decir su nombre, pero a quien todas las personas que entran y salen en ese despacho denominan don Manuel, quien me explica que estos abonos son una imposición de la Comunidad de Madrid a la empresa Toresma, SA, y a ellos no le supone ningún beneficio, por lo que están dispuestos a eliminarlos para esta temporada que comienza, y nos van a utilizar como cabezas de turco, a las personas que los extraviemos o seamos motivo de sustracción, para así señalar su mal uso.

Una vez finalizada su explicación exijo que me comunique la retirada de mi abono por escrito, soy expulsado de aquel despacho inmediatamente con forcejeos y amenazas. Una vez más, la picaresca funciona en este país.

Después de esto envié una carta al Centro de Asuntos Taurinos de la Comunidad, sin haber recibido por el momento ninguna contestación, y como está próximo el comienzo de la temporada y me encuentro sin mi abono, me he decidido a escribirle.-