Los curas secularizados anuncian movilizaciones para poder cobrar jubilación
El Colectivo de Sacerdotes y Religiosos y Religiosas Secularizados (Cosarese), que reúne a unas 2.000 personas, acordó el pasado fin de semana en su asamblea nacional iniciar una campaña de acciones y movilizaciones. El objetivo es forzar a que el episcopado plantee al Gobierno el derecho a cobrar jubilación de unos 18.000 secularizados.
El problema se remonta a 1978 para los sacerdotes y a 1982 para religiosos y religiosas. En estos anos aparecen sendos decretospor los que quedan automáticamente incluidos en el régimen general de la Seguridad Social los curas y religiosos en activo...
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El Colectivo de Sacerdotes y Religiosos y Religiosas Secularizados (Cosarese), que reúne a unas 2.000 personas, acordó el pasado fin de semana en su asamblea nacional iniciar una campaña de acciones y movilizaciones. El objetivo es forzar a que el episcopado plantee al Gobierno el derecho a cobrar jubilación de unos 18.000 secularizados.
El problema se remonta a 1978 para los sacerdotes y a 1982 para religiosos y religiosas. En estos anos aparecen sendos decretospor los que quedan automáticamente incluidos en el régimen general de la Seguridad Social los curas y religiosos en activo. Por tanto, quienes decidieron secularizarse antes de esas fechas no han visto computados a efectos de pensiones los años cotizados a la Mutual del Clero. El presidente de Cosarese, Manuel Castellá, manifestó ayer que esta petición ha sido presentada en diversas ocasiones y sin éxito por vía parlamentaria por parte de Grupo Catalán e Izquierda Unida. El PSOE quiere abordar el problema en el contexto de la comisión mixta técnica Iglesia-Gobierno y que sea el episcopado el que lo proponga. Con ello, el Ejecutivo, según Cosarese, pretende abordarlo dentro de la negociación con la Iglesia. Por su parte, el episcopado no quiere plantearlo dentro de ese paquete, según Castellà, que acusa a la cúpula eclesial de dar largas al problema.
A finales del año pasado la propuesta ya estaba prácticamente ultimada por vía parlamentaria. No obstante, el mal momento de las relaciones Iglesia-Gobierno -campaña sobre el uso de preservativos y el documento sobre la situación moral en la sociedad española- hizo que el PSOE no diera su visto bueno a la enmienda.