La crisis minera enfrentó a Felipe González y Guerra en la última ejecutiva federal

/ ANABEL DÍEZ El presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, Felipe González, y el vicesecretario general socialista, Alfonso Guerra, tuvieron un acalorado enfrentamiento en la comisión ejecutiva socialista el pasado martes a causa de la reconversión de la empresa minera Hunosa, según miembros de la ejecutiva. Felipe González, en su intervención ante la dirección del PSOE, puso el acento en la necedad de afrontar la reconversión minera, mientras Guerra defendió con énfasis los posulados obreristas de José Ángel Fernández Villa, presidente del sindicato minero SOMA-UGT y miembro de l...

/ ANABEL DÍEZ El presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, Felipe González, y el vicesecretario general socialista, Alfonso Guerra, tuvieron un acalorado enfrentamiento en la comisión ejecutiva socialista el pasado martes a causa de la reconversión de la empresa minera Hunosa, según miembros de la ejecutiva. Felipe González, en su intervención ante la dirección del PSOE, puso el acento en la necedad de afrontar la reconversión minera, mientras Guerra defendió con énfasis los posulados obreristas de José Ángel Fernández Villa, presidente del sindicato minero SOMA-UGT y miembro de la ejecutiva.

La polémica reconversión minera de Hunosa fue el último punto del orden del día de la reunión de la comisión ejecutiva del PSOE. del martes día 15. El presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, Felipe González, planteó la necesidad de afrontar la reconversión minera teniendo en cuenta las directivas de la Comunidad Económica Europea (CE), contrarias a subvencionar sectores en recesión como la minería.El presidente de Hunosa, Juan Pedro Gómez Jaén, manifestó el pasado jueves ante la Comisión de Presupuestos del Congreso que el consorcio minero perderá 65.000 millones de pesetas en 1991. Por su parte, el presidente del Instituto Nacional de Industria (INI), Javier Salas, manifestó el mismo día ante la misma comisión parlamentaría que este organismo pretende cerrar nueve de los 23 pozos y reducir 5.950 trabajadores de la actual plantilla de 17.600. En ámbitos próximos al ministro de Industria, Claudio Aranzadi, se asegura que su titular cuenta con el respaldo del presidente del Gobierno.

Felipe González, en su intervención, recordó las directrices comunitarias que entrarán próximanmente en vigor y la imposibilidad del Gobierno de subvencionar la profunda crisis minera. La intervención del presidente del Gobierno originó la réplica enfática de José Angel Fernández Villa, presidente del sindicato minero SOMA-UGT y miembro de la ejecutiva socialista. Fernández Villa -interpeló" a González, según expresión de un miembro de la ejecutiva, "en su habitual estilo poco dado al guante blanco, pero que no extraña a nadie y menos, al secretario general", señala este portavoz.

José Ángel Fernández Villa, hombre fuerte del sindicato y del PSOE en la región asturiana, en la que los socialistas cuentan con un fuerte respalde de voto, puso énfasis en la "dura actitud" de la dirección de la empresa Hunosa, a la que acusó de "intratable"y de negarse a la negociación con los sindicatos. Posteriormente intervino el vicesecretario general del PSOE, Alfonso Guerra, que defendió las posiciones de Fernández Villa.

Discrepancia de datos

Alfonso Guerra presentó un informe sobre la situación de Hunosa, que fue rebatido por Felipe González con otros datos muy diferentes. El debate entre los números uno y dos del PSOE -pese a situarse en un terreno técnico- fue "acalorado", según miembros de la comisión ejecutiva socialista asistentes a la reunión. Felipe González -según un miembro de la ejecutiva distante del guerrismo- "estuvo muy ponderado, mostró un conocimiento muy profundo de la situación de Hunosa y defendió una solución dialogada para resolver la profunda reconversión que se avecinaGonzález, no obstante, no dejó margen a la duda respecto a la fuerte reducción de plantilla que debe hacerse. Miembros de la ejecutiva señalan que Alfonso Guerra fue rebatido por González con una valoración técnica distinta a la que expuso el vicesecretario general. También indican que le ha hecho un flaco favor a Alfonso al aportarle datos parciales, y, sobre todo, porque en ese terreno siempre le ganará a Felipe por la extremada diferencia que hay entre estar y no estar en el Gobierno en relación con la calidad de los datos y los informes".

Miembros de la ejecutiva del PSOE justifican la preocupación de Guerra por la situación en Asturias, dada la "vinculación afectiva" del vicesecretario general con esa comunidad, en la que trabajó activamente antes de la democracia. Guerra acude sistemáticamente en campaña electoral a la región, donde tiene recibimientos calurosos.

El debate, que se prolongó cerca de una hora, derivó hacia la manera de conducir la negociación sobre la reconversión minera y culminó con el acuerdo por parte de la comisión ejecutiva socialista de impulsar la negociación entre empresa y sindicatos. Mañana, lunes, empresa y sindicatos se reunirán en Asturias a instancias del PSOE.

No obstante, el asunto principal de la reunión de la ejecutiva fue el diseño autonómico, tampoco exento de tensión. Raimon Obiols, secretario general del PSC-PSOE, criticó la actitud mantenida por el presidente de la Junta de Extremadura, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, contrario a que las autonomías puedan gestionar el IRPF.