Los dividendos de las empresas no podrán crecer mas que los salarios

El Gobierno entregó ayer a los grupos parlamentarios el documento de su pacto de progreso. En él se prevé que el reparto de dividendos de las empresas no crezca más que los salarios, y ambos deben alcanzar en tres años los niveles comunitarios. A cambio, sindicatos y patronal participarán en las medidas de control de la inflación. El Ejecutivo está convencido de que su propuesta "no perjudica a nadie, puede ser acogida favorablemente por sindicatos y empresarios, y, presumiblemente, por todas las fuerzas políticas% según se dice textualmente.

El documento del Ejecutivo avanza que la ref...

El Gobierno entregó ayer a los grupos parlamentarios el documento de su pacto de progreso. En él se prevé que el reparto de dividendos de las empresas no crezca más que los salarios, y ambos deben alcanzar en tres años los niveles comunitarios. A cambio, sindicatos y patronal participarán en las medidas de control de la inflación. El Ejecutivo está convencido de que su propuesta "no perjudica a nadie, puede ser acogida favorablemente por sindicatos y empresarios, y, presumiblemente, por todas las fuerzas políticas% según se dice textualmente.

El documento del Ejecutivo avanza que la reforma del Instituto Nacional de Empleo (Inem) es uno de los objetivos irrenunciables y pretende obligar a los parados a asistir a cursos de formación profesional como condición para cobrar el subsidio de desempleo.La participación sindical en las reformas estructurales y en la propia transformación del Inem es la principal contrapartida que se ofrece a las centrales sindicales UGT y CC 00 en la mesa de negociación. A los empresarios les propone incentivos fiscales a la inversión y un mejor trato al ahorro a través de la modificación de la Ley del Impuesto sobre Sociedades.

El Gobierno quiere aplicar un régimen fiscal transitorio durante el periodo de vigencia del pacto -entre 1992 y 1994- que incentive la creación de fondos empresariales para financiar programas de investigación y desarrollo, formación profesional y creación de redes comerciales enel extranjero. Un trato fiscal favorable tendrán también los beneficios no distribuidos y que se reinviertan en la empresa.

Todas estas medidas persiguen incrementar la competitividad de las empresas españolas frente al reto del mercado único europeo de 1993. Para que los trabajadores alcancen también la preparación comunitaria, el Gobierno propone la revisión del mercado de trabajo. La reforma de las modalidades de contratación temporal se basará en los estudios realizados por la comisión de expertos. Páginas 59 a 62