La situación en el Báltico, eje de la visita del líder soviético a Suecia

El líder soviético, Mijaíl Gorbachov, llegó ayer a Estocolmo procedente de Oslo en una visita que giró fundamentalmente en torno a la situación en la repúblicas bálticas. Es la primera vez desde 1964, cuando Nikita Jruschov viajó oficialmente a Suecia, que un líder soviético realiza una visita similar.En las afueras del aeropuerto de Arlanda esperaban grupos de manifestantes con carteles alusivos a la situación en Afganistán y en las repúblicas bálticas. Lo más relevante de la ajustada visita de poco más de seis horas a la capital sueca fue la conversación que mantuvo con el primer ministro, I...

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El líder soviético, Mijaíl Gorbachov, llegó ayer a Estocolmo procedente de Oslo en una visita que giró fundamentalmente en torno a la situación en la repúblicas bálticas. Es la primera vez desde 1964, cuando Nikita Jruschov viajó oficialmente a Suecia, que un líder soviético realiza una visita similar.En las afueras del aeropuerto de Arlanda esperaban grupos de manifestantes con carteles alusivos a la situación en Afganistán y en las repúblicas bálticas. Lo más relevante de la ajustada visita de poco más de seis horas a la capital sueca fue la conversación que mantuvo con el primer ministro, Ingvar Carlsson.

De camino hacia la sede del Gobierno, Gorbachov fue abordado por algunos periodistas cuyas preguntas se centraron en la situación. de las repúblicas bálticas. "Compatir sentimientos con un país vecino como es el caso de Suecia respecto a las repúblicas bálticas", dijo Gorbachov, "no debe transformarse en una forma de intromisión en asuntos internos de otro país. Especialmente en estos momentos, cuando la Unión Soviética se encuentra en un proceso de reformas".

"No es aceptable estimular el separatismo y la opresión de minorías", agregó aludiendo a la que se han denunciado contra los rusos que viven en las repúblicas bálticas, "ya que el proceso es muy complicado".

En la conversación de Gorbachov con el primer ministro sueco, este último planteó el punto de vista de su país sobre el derecho de las repúblicas a la independencia y la importancia de una solución por la vía del diálogo y sin utilización de la violencia acorde con el espíritu de Helsinki. Gorbachov coincidió en este punto y manifestó la necesidad absoluta de un proceso ordenado.

Contra la independencia

El líder soviético dijo también que había habido total coincidencia con Carlsson en que la eventual independencia de cualquiera de las repúblicas de la Unión Soviética debía hacerse dentro de los marcos constitucionales.

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"Quien crea que se puede destruir ese marco se va a llevar una decepción", dijo. "Ingvar Carlsson y yo nos comprendimos bien, y yo creo que el pueblo sueco entiende la complejidad de la situación".

Aludiendo a manifestaciones del presidente del Parlamento ruso, Borís Yeltsin, en el sentido de que él podía hacerse cargo de los rusos que viven en las repúblicas bálticas, dijo que ésta era una afirmación no meditada. "Hay dos millones y medio de rusos en las repúblicas bálticas", dijo Gorbachov, y ¿qué pasaría con los 11 millones de rusos que viven en Ucrania?"

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