Tribuna:

Movimiento a cámara lenta

El índice general del mercado de valores madrileño se ha resistido, con éxito, a abandonar el nivel del 280%. Las realizaciones de inicio de semana, en un proceso interpretado como el descuento previo de indicadores negativos, han finalizado. El dinero, de forma tímida, a cámara lenta, ha tomado posiciones animado por la buena disposición mostrada por los mercados internacionales y, en especial, de Wall Street.No obstante, la cautela continúa presente entre los inversores. Los volúmenes de negocio se mantienen más que discretos y el pasado lunes no se superaron los 10.000 millones de pesetas....

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El índice general del mercado de valores madrileño se ha resistido, con éxito, a abandonar el nivel del 280%. Las realizaciones de inicio de semana, en un proceso interpretado como el descuento previo de indicadores negativos, han finalizado. El dinero, de forma tímida, a cámara lenta, ha tomado posiciones animado por la buena disposición mostrada por los mercados internacionales y, en especial, de Wall Street.No obstante, la cautela continúa presente entre los inversores. Los volúmenes de negocio se mantienen más que discretos y el pasado lunes no se superaron los 10.000 millones de pesetas.

Ayer, ninguna sociedad superó el millón de títulos negociados. Faltan alicientes y sobra prevención. La bolsa se conforma, al parecer, con mantener posiciones a la espera de datos que permitan la escalada al soñado 300%.

Las constructoras, castigadas por las realizaciones en las últimas sesiones se encargaron de encabezar el rebote. Las siderúrgicas, por el contrario, sufrieron los recortes propiciados por los movimientos en corto. En general, se están cumpliendo las predicciones. La bolsa está aburrida y a la espera de nuevos estímulos mientras las instituciones se conforman con no perder. Arriesgar, lo que se dice arriesgar, no arriesgan ni un duro.

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