El Gobierno admite adelantar parte de la reforma fiscal a 1991

El Congreso convalidó ayer, con el único respaldo del grupo Socialista, el real decreto ley que prorroga a 1991 la actual normativa del impuesto sobre la renta y el patrimonio. No obstante, todos los grupos parlamentarios apoyaron su posterior tramitación como ley, de forma que se puedan introducir algunas enmiendas que adelanten parte de la reforma fiscal aplazada para 1992. Por otra parte, fuentes del Ministerio de Hacienda señalaron ayer que la actualización de las retenciones del IRPF no entrará en vigor en el mes de enero y "posiblemente tampoco, en febrero".La posterior tramitación parla...

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El Congreso convalidó ayer, con el único respaldo del grupo Socialista, el real decreto ley que prorroga a 1991 la actual normativa del impuesto sobre la renta y el patrimonio. No obstante, todos los grupos parlamentarios apoyaron su posterior tramitación como ley, de forma que se puedan introducir algunas enmiendas que adelanten parte de la reforma fiscal aplazada para 1992. Por otra parte, fuentes del Ministerio de Hacienda señalaron ayer que la actualización de las retenciones del IRPF no entrará en vigor en el mes de enero y "posiblemente tampoco, en febrero".La posterior tramitación parlamentaria del decreto de prórroga como ley permitirá "que este no sea un año perdido en la adaptación española al reto europeo", según afirmó Francesc Homs, diputado de Convergencia y Unió, grupo que propuso esta iniciativa. En concreto, mencionó los beneficios fiscales al ahorro y un mejor tratamiento para la unidad familiar.

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Mientras se produce: esta segunda vuelta, el real decreto ley entrará en vigor el 1 de enero tal como se aprobó ayer en el Congreso y tendrá efectos prácticos en las declaraciones de renta y patrimonio que se presenten en junio de 1992. Así, la tarifa se deflacta en un 5% -suben las bases imponibles en este porcentaje y se mantienen los tipos- para eliminar el efecto de la inflación. También se elevan en el mismo 5% las deducciones.

El decreto suaviza además el tratamiento fiscal de los no residentes, modifica el impuesto de sociedades para adaptarlo a la reforma contable y mercantil y no considera incremento ni disminución de patrimonio las operaciones con certificados del Banco de España.

Sólamente el grupo Socialista respaldó este real decreto, mientras que el CDS y CIU se abstuvieron y votaron en contra Izquierda Unida y el PP. IU Justificó su rechazo por considerar que así se prorroga un sistema fiscal "que está agotado", según afirmó Ramón Espasa. Por su parte, Juan García Margallo, del PP, criticó al Gobierno por "haberse hecho un regalo de Navidad de 390.000 millones de pesetas", al aplazar por un año la reforma.

Por otra parte, la actualización en un 5% de las retenciones del IRPF no se producirá en enero, -porque no da tiempo ya que el decreto no está preparado y, cuando lo esté, tiene que ser oído el Consejo de Estado", afirmó un alto cargo de Hacienda.

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